El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha defendido hoy la necesidad de que la jornada laboral de los funcionarios esté regulada "con carácter general" para toda España y sea "común", pero ha considerado que en la organización del trabajo "sí que hay un margen de flexibilidad".

Catalá, que ha asistido hoy en Málaga a un acto de entrega de condecoraciones, ha hecho estas declaraciones a los periodistas al ser preguntado por el fallo del Tribunal Constitucional que estima el recurso del Gobierno central contra la reducción de la jornada laboral a 35 horas.

Ha manifestado a los periodistas que la igualdad de todos los españoles es "un valor muy importante" de la Constitución, por lo que ha opinado que las condiciones de trabajo de los servidores públicos deben ser "iguales en toda España".

Según el titular de Justicia, la modificación de la jornada no es competencia de una comunidad autónoma y es una "característica básica" del empleo público, "sin perjuicio de que se pueda negociar", pero "con una visión nacional" y con "carácter de igualdad" para todos los empleados públicos, ha precisado.

En cuanto a la solución planteada por la Junta, que sumará a la jornada "presencial" de 35 horas semanales que implantó a sus empleados otras 2,5 horas más de trabajos previos para cumplir la sentencia, Catalá ha indicado que hay funcionarios públicos que necesitan "actividad adicional preparatoria" de su ejercicio.

En este sentido, se ha referido a los docentes que preparan sus clases, a los funcionarios públicos que tienen una actividad dedicada a la formación o al sector sanitario.

Por ello, ha argumentado que con una jornada laboral "común", la organización del trabajo es una cuestión más propia de los sectores, y ha añadido que "ahí sí que hay margen para la organización singular de cada uno".

Preguntado por si sería recurrible esta solución de la Junta, ha dicho que no conoce los detalles jurídicos, por lo que no puede opinar al respecto.

Ha incidido en el aspecto de la organización y distribución de la jornada al señalar que "no trabaja igual una enfermera a turnos en un hospital que un catedrático de universidad o un funcionario de una Consejería".

El ministro de Justicia ha sostenido que en la organización del trabajo hay "un margen de flexibilidad, siempre respetando los derechos básicos que son iguales para todos los españoles".