El diputado socialista Miguel Ángel Heredia mostró ayer su preocupación por el «fuerte incremento» de las víctimas mortales en accidentes de tráfico en la provincia de Málaga en 2017. Por ello, exigió al Gobierno «medidas inmediatas» para reducirlas, así como más inversiones en mejora de carreteras e instalar radares en puntos negros.

El aumento de muertes, aseguró, ha sido ocho veces mayor que el de la media nacional. Así, cifró en 39 las personas que perdieron la vida en accidentes de tráfico en las carreteras de la provincia en 2017, ocho más que en 2016, lo que representa un incremento del 26 por ciento. Este aumento es «brutal», dijo Heredia, «si lo comparamos con el aumento nacional que ha sido del 3,3 por ciento». Además, con estos datos, 2017 se alza como el «peor registro» desde 2010 en las carreteras malagueñas.

Dentro de estas estadísticas las muertes en moto »van en aumento», señalóel socialista, explicando que han sido diez los fallecidos, «lo que representa que más de una de cada cuatro víctimas mortales en accidente fue motorista». Por tanto, «nuestra provincia está también por encima de la media nacional, donde es una de cada cinco».

El diputado socialista anunció que va a registrar en el Congreso una batería de iniciativas dirigidas al Gobierno para que explique las causas de este «brutal incremento» en el número de víctimas en accidentes de tráfico en general y, particularmente, de motoristas.

Por otro lado, consideró que este incremento «contrasta con el hecho de que Málaga sea la provincia donde más se recauda por multas de tráfico en España», siendo la «segunda provincia española donde se ponen más multas, sólo por detrás de Madrid».

En este sentido, Heredia pregintó que «¿cómo siendo Málaga la sexta provincia en población, somos la segunda donde más se multa, casi como Madrid, que tiene cuatro veces más población?» y, además, «es la provincia donde el Gobierno más recauda por multas».

Por ello, Heredia planteará al Gobierno que explique «por qué la recaudación de los radares de tráfico es tan elevada y no sirve para reducir las víctimas mortales en nuestras carreteras». Y añadió que «los radares no están en los puntos negros de tráfico para prevenir accidentes, sino que el Gobierno de Rajoy los ha instalado en lugares estratégicos para conseguir la máxima recaudación».