Málaga continúa recuperando poco a poco su censo empresarial tras una crisis que se llevó por delante más de 16.000 firmas y está cada vez más cerca de los niveles que ostentaba antes del estallido de la recesión. La provincia ha cerrado así el año 2017 con la cifra más elevada de compañías de los últimos diez ejercicios, justo cuando empezaba la recesión. Los últimos datos de la Seguridad Social indican que a diciembre hay 56.831 firmas adscritas al Régimen General, un número muy próximo a las 58.400 que se contabilizaban durante ese mes en el año 2007, que marcó la cúspide del proceso expansivo de la economía. A lo largo del pasado año, Málaga ha ganado en concreto cerca de 280 empresas.

El alza del censo empresarial, no obstante, no va acompañada de una recuperación equiparable del empleo. Las cifras de paro, en este sentido, son claras: Málaga tiene ahora 157.573 parados, el doble de los que se registraban antes de la crisis. Las cifras de afiliados a la Seguridad Social sí están más igualadas. Si entonces se manejaba una cota de más de algo más de 590.000 cotizantes en la provincia, la cifra ahora es de 579.787.

La calidad del empleo se ha resentido también mucho, como vienen denunciando los sindicatos, con unas altísimas cotas de temporalidad (muchos trabajadores encadenan un contrato tras otro rotando de forma continua por diversos puestos y empresas) y un peso creciente de la jornada a tiempo parcial en detrimento de la jornada completa.

Analizando por partes el escenario económico de la provincia, las cifras de empresas revelan una clara reactivación económica. Cabe recordar que en los ejercicios más duros de la recesión, el censo en Málaga llegó a caer a niveles de entre 47.000 y 49.000 firmas en la provincia. Fue a partir de 2013 cuando se empezó a experimentar un repunte, inicialmente muy leve y luego de mayor intensidad. El dato de este 2017 confirma la positiva evolución detectada en los últimos ejercicios, siendo más los nuevos negocios que cada mes se constituyen en Málaga que los que desaparecen.

Sin embargo, el incremento de empresas no esconde que al actual tejido empresarial malagueño no puede compararse todavía al de antes de la crisis, principalmente porque las compañías manejaban de media en aquel entonces plantillas superiores a las de ahora, según admite la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM)., Las firmas que han ido apareciendo responden en bastantes ocasiones al perfil de autoempleo o al de pequeñas firmas con una media de entre dos y cuatro trabajadores mientras que las que desaparecieron eran más voluminosas.

Mucho autoempleo

La mejora de la actividad también se está dejando notar en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). En Málaga hay ahora mismo 111.814 autónomos, lo que sitúa a la provincia en sus máximos históricos para ese mes, incluso por encima de lo que se contabilizaban antes de la crisis. En 2017, Málaga ha ganado casi 2.500 trabajadores por cuenta propia, según datos de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA). En lo más profundo de la crisis, la cifra de autónomos en Málaga llegó a caer al entorno de las 93.000 personas.

En los últimos años, la opción del autoempleo para los parados que no encontraban oportunidades de trabajo ha hecho repuntar sensiblemente la cifra de afiliados al RETA. Pero los sindicatos recuerdan que entre estas cifras hay casos de «falsos autónomos», es decir, personas a las que sus empresas les hacen trabajar de forma externa.