La violencia sexual en la mujer es un tema que lleva años estudiándose y, en la mayoría de los casos, es a la propia víctima a la que se le culpabiliza por los hechos. Es por ello que muchas de las afectadas no denuncian. En este tipo de violencia y en la culpabilización, asegura el profesor Canto, ha influido, según los resultados de su estudio, la «cultura del honor».Cuando se habla de ésta, nos referimos a aquellos comportamientos violentos a consecuencia de actitudes que puedan ser consideradas de menosprecio o falta de respeto. En el caso masculino, la percepción de esta cultura se sustenta sobre la fidelidad femenina, y actúa de forma violenta cuando siente que su honor está siendo violado. Por el contrario, en el caso femenino, se sustenta sobre la castidad, fidelidad sexual y pureza. Si no cumple con esto, el hombre actuará para proteger su propio honor.

¿Qué motivos le llevaron a querer realizar este estudio?

Fue puntual y real. Una alumna de la Facultad de Educación sufrió intentos de abusos por parte de un profesor. Esto y los comentarios de alguno de sus compañeros culpando a la víctima fue ron lo que me motivó.

¿Cree que el número de casos de violencia ha aumentado o cree que actualmente se le da más voz?

No tengo datos, pero hay más de las que se denuncian. En lo privado pensábamos que la familia, la pareja o la escuela eran escenarios de paz, pero ya sabemos que no tanto, porque hay violencia. Si nos centramos en la violación, también creo que ahora somos más conscientes de la manera en la que se agrede y hay una lucha en España para intentar corregir y eliminar esta lacra, pero no es tan fácil, porque hay una resistencia muy fuerte.

¿Qué diferencia cree que hay entre la violencia en parejas adultas y las adolescentes?

No tengo datos, pero creo que dentro de la población joven y de la población adulta hay mucha variedad. Porque yo, por ejemplo, con la edad que tengo, siendo adulto, he luchado contra este machismo que está escrito. De lo que sí somos conscientes pero no es comparativo con los adultos, es que en los jóvenes hay un repunte del machismo, de actitudes sexistas y de la cosificación de la mujer como objeto sexual, aunque esto no quiere decir que todos los jóvenes cosifiquen.

¿Cuándo se culpa a la mujer de ser violada?

Si es violada una niña o una anciana, no se aplica el mito de aceptación de culpabilidad de la víctima y exoneración al agresor. Si un desconocido asalta a una mujer en la calle, tampoco. Este mito se aplica si esta situación de violación se da donde hay cierta ambigüedad o donde la mujer ha realizado comportamientos que se pueden denominar de riesgo, y descubrimos que es donde la ideología surge, y en función de ciertas variables, se culpa a la mujer, que es consciente que va a ser culpabilizada y linchada, porque cuando esta asume una conducta de cierta libertad sexual, que coquetea, que acepta una copa... ya se le dice que ha sido ella que ha provocado la situación. En el fondo, hay miedo a la libertad de la mujer y una visión de la sexualidad del hombre muy primitiva, que dice que a partir de cierto momento, no puedo frenarme. No lo entiendo.

¿Por qué o a consecuencia de qué cree que se crea esta cultura del honor?

Está escrita. Procedemos de ella, son formas de control, el sexismo lo es. La cultura del honor que está asociada, se construye en la hombría, porque el hombre tiene que defender su honor, establece cómo deben ser las relaciones... Está dentro de una ideología que gira en torno al control.

Habla del desarrollo de programas de prevención y formación para evitar futuras agresiones sexuales, ¿qué tipo de programas serían?

En la gente joven lo esencial es que la familia, la escuela y los medios enseñen esta educación sexual. Y no solo esto, también deben enseñar los conocimientos de cómo debe ser una relación. Hay una necesidad, no solo de un programa específico, de que si una chica dice que no, es que no. También debe crearse un programa de derechos, de cómo desmontar los mitos que hay... programas específicos en el que se explique, por ejemplo, que una chica que no se resiste ya no se considera violada. No tiene por qué ser así, porque en ese momento puede que se haya quedado bloqueada y piense que si se resiste va a ser peor. A su vez, hay que crear programas donde tienen que desobstruirse esta concepción negativa de la sexualidad de la mujer cuando la asume y se libera.

Con los resultados obtenidos, ¿cree que este problema aumentará o disminuirá a corto plazo?

Se sabe que el número de violaciones es mayor que el de denuncias, pero no creo que aumente. No hay datos para afirmarlo, pero me llama la atención lo violentos que somos en las relaciones, en la familia, con los animales… cuando debería ser algo de disfrute, una experiencia agradable, aunque sea breve.

¿Tiene en mente realizar algún estudio relacionado?

Tengo dos. Uno sobre cómo influye la clase social en la percepción de la culpa de la víctima, siendo el acto el mismo, y el otro sobre la percepción de los abusos psicológicos en la violencia de género. Me parece muy interesante.