La aplicación de comida a domicilio Uber Eats, que celebra su primer año en España, impulsará su expansión en el mercado nacional con su desembarco en Barcelona a lo largo del primer trimestre del año, así como su entrada en Málaga, Sevilla, Valencia y Zaragoza a lo largo del año.

En concreto, la plataforma prevé multiplicar por seis su número de restaurantes hasta contar con más de 5.000 en el mercado nacional y pasar de los 15 empleados actuales a 50 con esta expansión. «Tenemos un ambicioso plan de crecimiento, que será agresivo tanto en España como a nivel mundial, ya que la industria seguro que va a acompañar», indicó ayer el director general de Uber Eats, Manel Pujol.

Asimismo Pujol recordó que la plataforma está presente en más de 200 ciudades de 30 países y cuenta con más de 80.000 restaurantes, de los cuales 800 son de Madrid. «Empezamos con 250 restaurantes y tenemos ya 800, por lo que empezaremos la expansión a barrios del Sur de la capital de densidad menor y a municipios como Leganés o Getafe», explicó.

De esta forma, Uber Eats, que actualmente no genera beneficios en España, reconoce que 2018 será un «año muy interesante» para la compañía, empezando con la llegada a Barcelona, que es una ciudad «altamente gastronómica». «Queda mucho recorrido por hacer y esperemos estar operativos en las próximas semanas o meses», avanzó.

Respecto al mercado de la comida a domicilio, el director abre la puerta a la entrada de más competidores. «El tamaño del mercado es enorme, de 3.500 millones de euros, y pueden entrar más competidores porque es posible. Sería una buena noticia y la competencia es buena porque hay sitio para todos», recalcó.