La Junta de Gobierno Local aprobó ayer la participación en el proyecto europeo «Próxima generación de planificación de la movilidad urbana sostenible para el transporte de personas y mercancías», dentro del eje sobre transporte inteligente, verde e integrado del programa Horizonte 2020, de financiación de la investigación y la innovación en la Unión Europea para el periodo 2014-2020.

El programa específico se orienta hacia las necesidades presentes y futuras de los ciudadanos, las empresas y los mercados de la UE, esforzándose por maximizar el valor del sector del transporte, la economía en general y los mercados de la UE, y en última instancia, las personas. Estas prioridades tienen por objeto crear nuevas oportunidades para la sostenibilidad crecimiento y empleo.

La convocatoria de 2018 de este Programa, incluye el subtema que se centra en construir un futuro con bajas emisiones de carbono y resiliencia al clima mediante la búsqueda de una gestión del transporte sostenible con un enfoque multidimensional que evalúe las nuevas formas de movilidad en todos los modos de transporte, sus infraestructuras, la evolución del flujo de viajes, el desarrollo económico y espacial, las cuestiones medioambientales y de calidad de vida, las cuestiones de gobernanza a nivel espacial e institucional y los patrones de comportamiento de los ciudadanos.

Por ello, el Ayuntamiento de Málaga pretende participar en una propuesta que concurra a esta convocatoria cuyos principales objetivos son: reducir la congestión; reducir el consumo de energía, la contaminación, las emisiones, el ruido y el uso del suelo; aumentar la coordinación de la infraestructura de transporte multimodal y el desarrollo de la economía espacial y reducir las desigualdades debidas al acceso al transporte.

El proyecto se centra en la gestión de la demanda de movilidad efectiva utilizando las últimas tecnologías aplicables como el Big Data o Machine Learning para aprovechar la información sobre movilidad ya disponible y agregar nuevas fuentes de datos mediante las redes de teléfonos móviles, datos de posicionamiento de los sistemas de navegación por satélite, identificación WiFi, etc, junto con la información de sensores medioambientales y nuevos canales de comunicación con los ciudadanos, como por ejemplo los dispositivos móviles, redes sociales, etc. con el objetivo de aplicar estrategias de control y planificación del tráfico y del transporte público más efectivas de cara a reducir la contaminación y las congestiones.

Desde el punto de vista medioambiental, el proyecto conseguirá evolucionar el concepto de transporte y movilidad hacia un sistema más sostenible, con un entorno más limpio y saludable reduciendo la contaminación.