Los problemas laborales, económicos y psicológicos son algunos a los que los pacientes con cáncer deben hacer frente además de a la enfermedad. La sociedad conoce el proceso por el cual pasan las personas que sufren un cáncer, sin embargo, existen otros problemas que tienen menos eco y que los pacientes deben asumir como consecuencias de su enfermedad y afrontarlos al mismo tiempo que están en tratamiento. Los gastos económicos son uno de los más relevantes.

En el caso de Málaga, unos 3.897 hogares tienen problemas económicos por los gastos extra que se producen cuando alguno de sus miembros padece esta enfermedad. En cuanto a Andalucía, la cifra alcanza los 19.742 hogares, según los datos aportados ayer por la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). En Málaga, de estos hogares, unos 800 pacientes oncológicos están en situación de vulnerabilidad.

Para dar respuesta a estas necesidades, la AEEC ha pedido al Estado un Plan de Protección Integral para las familias con cáncer. Asimismo, ha presentado un estudio del Observatorio del Cáncer de la AECC sobre El impacto económico del cáncer en las familias en España. Un informe en el que se analiza el impacto económico del cáncer en la población activa, es decir, en personas mayores de 15 y menores de 65 años. En este sentido, los primeros datos extraídos del estudio aseguran que, en España, de forma anual, unas 25.000 personas con cáncer se encuentran en riesgo de exclusión social a causa del diagnóstico de la enfermedad. Esta cifra supone el 7,7% del total de diagnósticos en 2017 en la población activa en nuestro país.

Las bajas laborales van vinculadas a la enfermedad. El cáncer es una de las enfermedades que requieren una mayor duración media de las bajas laborales respecto a otras enfermedades. Así, un paciente de cáncer necesitaría una de las bajas más largas, lo que significa ante todo un elevado impacto, traducido a un «sufrimiento» para esa persona y su familia difícil de cuantificar, y que también significa un enorme impacto económico en el núcleo familiar.

VII Foro Contra el Cáncer

Para dar relevancia a estos problemas, la Asociación Española Contra el Cáncer organizó ayer la conferencia Los problemas no visibles de las personas con cáncer y sus familiares en la que, a través de dos mesas redondas, se trataron estos temas. En este foro participaron médicos, pacientes, familiares, psicólogos y trabajadores sociales.

En la primera mesa se habló de las necesidades de los pacientes activos. Por otro lado, la segunda mesa redonda se centró en el cuidado de los pacientes no activos, es decir, aquellos en los que la curación ya no es posible. En este sentido, la doctora de la unidad de cuidados paliativos de AECC Marbella, Luisa Ronco, destacó que durante esta etapa en la que el paciente debe enfrentarse a la situación de que no exista cura, «hay que tratar a los enfermos con mucho respeto y ofrecerles la mayor comodidad posible». Así, estas personas necesitarán cuidados para aliviar los dolores pero también cuidados psicológicos para sobrellevar la situación. «Los cuidados para aliviar el dolor son importantes, pero si sólo nos quedamos con eso, nos quedamos cortos», indicó Ronco.

Por otro lado, Antonio Rueda, director técnico del comité asesor de la Junta Provincial de la AECC en Málaga destacó que es necesario que se fomente y potencie la ayuda tanto a pacientes como familiares. «Es necesario que se elabore y apruebe un plan integral nacional para combatir esta situación en la que las familias sufren una vulnerabilidad muy importante», destacó Rueda. De esta forma, el oncólogo señaló que será necesario realizar un estudio profundo para averiguar cuál es la situación de cada familia , para más tarde poder presentar el informe en la administración pertinente.