Un hombre de 43 años ha sido detenido en Málaga por los presuntos delitos de estafa, falsedad documental y hurto. Además se le atribuye un delito contra la salud pública por supuestamente haber comercializado con los fármacos psicotrópicos en el mercado negro falsificando recetas. Según ha informado hoy la Comisaría Provincial, la investigación ha permitido recuperar dos sellos sustraídos de las consultas de sendos galenos de un centro hospitalario de la capital de los que el investigado no era paciente y se han intervenido 44 recetas falsificadas a nombre del investigado, una navaja, un ordenador portátil así como 20 gramos de cogollos de marihuana, dos de cocaína, 18 cajas de antidepresivos y un centenar de cajas de distintos fármacos de uso restringido, entre otros efectos. Hasta el momento, las pesquisas han demostrado que el acusado habría falsificado 185 recetas durante el mes de diciembre con las que habría conseguido en más de 50 farmacias de la provincia de Málaga distintos medicamentos, especialmente ansiolíticos.

El hombre fue arrestado por primera vez el pasado 18 de enero, sobre las dos de la madrugada, en la avenida Herrera Oria cuando fue sorprendido por una dotación policial con 18 recetas falsificadas para conseguir medicamentos tranquilizantes y ansiolíticos. Además se le intervinieron 110 comprimidos de distintos medicamentos psicotrópicos y un ordenador portátil. Los agentes averiguaron después que el investigado -que ya fue arrestado el 28 de diciembre en la zona de Atarazanas- durante el último mes del año recorrió hasta medio centenar de boticas de la provincia malagueña para presentar un total de 185 recetas con las que obtuvo de manera fraudulenta los medicamentos. Los agentes comprobaron el alto nivel de actividad delictiva de esta persona, motivo por el que se solicitó una orden de entrada y registro en su domicilio. Durante la entrada, los agentes sorprendieron al investigado tratando de romper ocho recetas falsificadas y listas para ser presentadas en cualquier farmacia. En el registro los agentes hallaron gran cantidad de medicamentos de los que precisan de receta médica para su expedición. Tras una minuciosa búsqueda, localizaron ocultos en el interior de un armario, pegados con cinta de embalar al lateral de un cajón, los dos sellos médicos denunciados como sustraídos y que habían sido utilizados para la falsificación de las recetas. Las investigaciones continúan abiertas hasta el total esclarecimiento de los hechos, no descartándose nuevas detenciones