La Policía Local de Málaga ha denunciado a una mujer por volar un dron sobre miles de personas durante el traslado el traslado del Cautivo y María Santísima de la Trinidad Coronada desde la casa hermandad hasta la iglesia de San Pablo. Fuentes policiales han explicado que la mujer reconoció que carecía de la autorización administrativa necesaria para esta actividad, motivo por el que se le pidió que cesara el vuelo ante el riesgo de que el dispositivo cayera sobre la multitud. Los agentes calculan que había entre 2.000 y 3.000 personas. En un vídeo que circula por las redes sociales, se aprecia cómo la mujer maneja el dron mientras observa en la pantalla del control remoto las imágenes que el dron graba desde el aire.

Los hechos ocurrieron la pasada tarde del Domingo de Resurrección durante el traslado de las imágenes. Las fuentes consultadas aseguran que, sobre las 20.00 horas, dos agentes de la Grupo Operativo de Apoyo (GOA) de la Policía Local que trabajaba en el dispositivo de seguridad de este traslado avistaron una aeronave tipo sobrevolando el trono a unos 20 metros de altura en la calle Trinidad. Ante la aglomeración de personas que había en el trayecto y el riesgo de que el dispositivo cayera, los agentes hicieron una batida para localizar a la persona que manejaba el aparato. Minutos después, identificaron a una vecina de Madrid de 49 años. Tras comprobar que no contaba con la autorización correspondiente, los agentes iniciaron una propuesta de sanción que se trasladará, a través de la Subdelegación del Gobierno, a la Unidad de Aeronaves Pilotadas con Control Remoto (RPAs) de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) por sobrevolar el dispositivo, de entre 25 y 30 centímetros de envergadura, sin autorización en espacio aéreo y sobre una multitud de personas.

Fuentes de la propia agencia han explicado a este periódico que los límites para volar estos dispositivos dependen de la finalidad del vuelo. Si el objetivo es grabar imágenes para publicar, es decir, un uso profesional "tendría que tener autorización de AESA y además de ser operador acreditado". En cambio, si el uso es lúdico, el factor más importante es el el peso del dron. "Si pesa menos de 250 gramos puede volarlo, pero no puede superar los 20 metros de altura y tiene que volar de día con condiciones meteorológicas adecuadas. Las sanciones, en personas físicas, van desde los 60 a los 45.000 euros en los casos leves; entre 45.000 y 90.000 los graves; y hasta 225.000 euros los muy graves. En personas jurídicas pueden ser de entre 4.500 y 70.000 los casos leves: hasta 250.000 euros los graves; y hasta 4,5 millones de euros los muy graves.