Los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO) y Unión General de Trabajadores (UGT) no descarta llamar a la huelga al sector de la hostelería si no llega a un acuerdo el próximo 24 de abril, en la que sería su sexta reunión con la patronal. "Estamos en la posición de que si no cambian la posturas radicalmente nos vemos obligado a convocar movilizaciones, sin descartar una huelga para este verano", anunció el secretario general del sector de hostelería de UGT, Antonio Solano, durante una asamblea informativa sobre la situación del convenio de hostelería, en proceso de renovación.

Según anunciaron ambos sindicatos en su primera acción conjunta, la primera movilización se celebrará en mayo con una marcha de cuatro días desde Marbella a Málaga. "Exigimos una modificación del tipo de contrataciones, disminuir los contratos de prácticas y un más contenido social", manifestó Antonio Solano, quien también aseguró que han revisado todo el articulado del nuevo convenio propuesto por la patronal y siguen sin estar de acuerdo. "Lo planteado por la patronal es un articulado retrógrado y fuera de toda norma" manifestó la secretaria general de Servicios de CCOO también presente en la asamblea.

Los sindicatos están satisfechos con el convenio anterior, vigente entre 2014-2017, y por ello exigen que no se rebajen, según ellos, los derechos contenidos hasta la fecha. "No ha motivo ninguno para volver al año 77", Villalba, quien reiteró que no van a permitir que desde la patronal se sigan externalizando los servicios, abaratando los costes y precarizando el empleo. "Venimos de un ambiente de optimismo en el sector donde la patronal ha revitalizado todos sus ingresos, siete veces mayor que lo percibido en el último convenio, y creemos que ha llegado el momento de tener unos sueldos dignos", añadió la secretaria general de Servicios de CCOO.

La extrenalización y subcontratación sigue siendo la mayor crítica por parte de los trabajadores. Además, denuncian que en la actualidad hay menos trabajadores y, por lo tanto, una mayor carga de trabajo. "Las situaciones laborales no tienen nada que ver con el 'boom' turístico que estamos viviendo en la ciudad", manifestó Villalba, quien comunicó que el Tribubal Superior le acaba de dar la razón a una camaera de piso en su pugna judicial para que su contrato externalizado contenga las condiciones del convenio, que afecta hasta a 90.000 trabajadores.

Desde los sindicatos critican a la patronal por pretender que la jornada laboral sea "a la carta", y pedir eliminar la semana de 40 horas, utilizar el cómputo anual de 1.800 horas y ampliar la distribución irregular de la misma al 10% (180 horas). Los sindicatos defienden que los trabajadores mantengan dos días de descanso continuado, y los empresarios aspiran a un día y medio, y a que puedan acumularse hasta 14 días sin descansar.

"Pretenden extrenalizan servicios, abaratan costes y no lo vamos a permitir", reiteró la secretaria general de Servicios de CCOO, quien argumenta que el bloqueo de la patronal se debe a una estretegia: "Pretenden que se demore, llegue el verano y firmemos si movilizarnos, pero no vamos a dar un paso atrás", argumentó. Por otro lado, también hizo afirmó que la patronal busca retroceder en derechos laborales "para cuando lleguen las vacas flacas" en el turismo malagueño.