Francisco Jesús Reina, vicepresidente de mancomunidad de propietarios de la calle Victoria Mérida y Piret, en Parque Mediterráneo, negó ayer que el jardín trasero en el que el pasado jueves, hacia las 2 de la madrugada, se incendió una palmera, estuviera cerrado y los bomberos no pudiera acceder a él a apagar el fuego, como declaró el pasado sábado a este diario la presidenta de la asociación de vecinos Una Nueva Realidad, María José García.
«Tenemos conserjes las 24 horas al día y me avisó a la 1.30, 1.45 de la mañana el que estaba esa noche», informó. Después de comprobar que no podían sofocar el incendio con sus propios medios, entre ellos una bomba para baldeo, Francisco Jesús Reina explicó que abrió la puerta central de este pasaje peatonal ajardinado y paso público, para facilitar el acceso a los bomberos, por ser la zona más próxima a la palmera incendiada así como a un ficus que también sufrió algunos daños.
El vicepresidente explicó que se encontraron en la zona verde «papeles de publicidad» a los que pudieron prender fuego y lanzar desde la plaza, a unos dos metros por encima del pasaje.
Francisco Jesús Reina recordó también que desde hace «más de veinte años», el pasaje ajardinado se encuentra cerrado por petición mayoritaria de la mancomunidad de Parque Mediterráneo, reiterada también en algún pleno municipal por seguridad: «Ese jardín da a ventanales de ventilación para aparcamientos y a los bloques impares; en una ocasión se metieron personas y metieron fuego en los sótanos de esos bloques», explicó.
El vicepresidente consideró «un desatino» hormigonar la zona, como pide la asociación de vecinos Una Nueva Realidad y recordó que la opinión mayoritaria es continuar con ese paso cerrado.
El concejal de la Carretera de Cádiz, Raúl Jiménez, declaró el pasado fin de semana que las comunidades de propietarios le habían pedido que el jardín trasero «siguiera cerrado» y anunció la próxima identificación de un grupo de jóvenes presuntamente relacionados con el incendio.
