El Refugio de la Sociedad Protectora de Animales y Plantas ha acogido hasta abril, es decir, en el primer cuatrimestre del año, a 545 mascotas: 381 perros, 127 gatos, 30 gaviotas y palomas, tres conejos, otros tantos hámster y una liebre, informó ayer la entidad.

Las gaviotas y las palomas, una vez recuperadas, son anilladas y puestas en libertado. Los conejos, hámsters y liebres son adoptados o llevados santuarios.

Asimismo, han entrado 227 perros y 77 gatos dejados por particulares, 23 perros y cuatro gatos fueron devueltos una vez adoptados. Asimismo, fueron rescatados del Centro Zoosanitario Municipal 75 canes y seis felinos, así como se ha actuado, a requerimiento de la Policía Local, para salvar a 56 perros y diez gatos.

La Sociedad Protectora de Animales afirma que «casi el 70% de los perros del refugio son canes de caza abandonados: casi todos llegan en muy mal estado físico, que conseguimos recuperar a base de buen pienso y cuidados veterinarios. Lo que más cuesta es quitarles su miedo al hombre, su timidez por temor al castigo, su retraimiento. Duele ver a estos perros temblando en un rincón del patio en sus primeros días. Sólo los mimos y los cuidados de los voluntarios y trabajadores consiguen convertir su miedo en seguridad».

La entidad afirma que hubo que practicar la eutanasia a trece perros y ocho gatos, así como también fallecieron por vejez o enfermedad 13 canes y 19 felinos.

La Sociedad Protectora también se queja de que «las camadas de lactantes, tanto de gatos como de perros, han entrado casi diariamente en el Refugio y la mayoría ha conseguido sobrevivir gracias al compromiso generoso de las casas de acogida, que no dudan en darles el calor y los bebés que necesitan estos pequeños». El colectivo destaca que la esterilización es imprescindible para acabar con «tanto abandono y tanta crueldad». Muchas camadas son dejadas en contenedores o cunetas.