­­Málaga se volcó de nuevo este jueves para mostrar su apoyo a la joven de 18 años víctima de La Manada en los Sanfermines de 2016. La manifestación, convocada por el Sindicato de Estudiantes y la plataforma feminista Libres y Combativas, reunió a casi unas 2.000 personas, medio millar según la Policía Nacional, entre las que no solo había estudiantes de Bachillerato y de la Universidad, sino también padres, madres, abuelas y abuelos decidieron sumarse a esta causa.

Los manifestantes mostraron su rechazo y total desacuerdo con la sentencia que condena a los miembros de La Manada por abusos sexuales y no por violación. Durante la marcha, que se sucedió en numerosas ciudades españolas, se podían leer pancartas con frases como: «seríamos más si no las hubieran matado», «hermana, yo sí te creo», «no es no», «consentir no es dejar, es violación».

Recorrieron las calles del Centro de la ciudad hasta la plaza de la Merced y realizaron una concentración en la plaza de la Constitución donde manifestaron a gritos de «aquí están, estas son las de la revolución», «que viva la lucha de las mujeres» o «tranquila, hermana, aquí está tu manada», el descontento general por lo que consideran «una justicia patriarcal».

En este sentido, Claudia, una joven manifestante, lanzaba el siguiente mensaje a los presentes: «Quiero transmitir que todos seamos iguales, que no nos desprecien más a las mujeres. Que toda la sociedad esté con nosotras y no nos utilicen».

Este encuentro no solo se produjo en Málaga, sino también en toda Andalucía, excepto en Jaén y en algunos municipios como Algeciras, según informó la secretaria general del Sindicato de Estudiantes de Andalucía Occidental, Ainoa Murcia. «Se trata de una sentencia que condena a las mujeres a que no nos crean si no nos resistimos o si no nos matan», destacó la joven y añadió que la respuesta en la calle no es sólo por el caso concreto de La Manada, sino que también por «las decenas y miles» de sentencias similares en las que, a su parecer, «las culpables al final» siempre son las mujeres y «esta es la respuesta que tenemos hoy contra la Justicia patriarcal».