La Gerencia de Urbanismo se muestra favorable a urbanizar el jardín trasero de Parque Mediterráneo, un pasaje peatonal mitad público, mitad privado, cerrado por los extremos, entre las calles Eduardo de Palacio y Luis Barahona de Soto, en el que el pasado 19 de abril se incendiaron dos palmeras y quedó dañado un ficus junto a uno de los bloques.

En una resolución a un recurso de reposición de la asociación de vecinos Nueva Realidad, de Parque Mediterráneo, la Gerencia de Urbanismo se apoya en un informe de los Bomberos de 11 de septiembre de 2017 y señala que la «solución más idónea» es seguir las indicaciones de este informe, que decía que la conversión del jardín trasero en un vial «facilitaría las intervenciones y/o evacuación en situación de emergencia». Un informe anterior de Bomberos, de diciembre de 2016, ya apuntaba algo similar.

En el pasado incendio los bomberos no pudieron aproximarse a la zona por la calle Victoria Mérida y Piret, la más próxima, porque es una plaza elevada bajo la que se encuentra el aparcamiento de la urbanización, y tuvieron que trabajar desde la calle Francisco Jiménez Lomas.

La resolución de la Gerencia de Urbanismo estima que esta franja ajardinada «es la única que posibilita y garantiza las condiciones de seguridad y accesibilidad para los edificios impares de la calle Victoria Mérida y Piret». De este modo, estima la petición de Nueva Realidad «en orden a que el Ayuntamiento realice el pertinente proyecto de urbanización en dicho pasaje», que tendría horario de apertura y cierre.

Nueva Realidad aprovechó para recordar ayer que, en diciembre de 2017, Urbanismo informó de la conclusión de los bomberos a las 14 comunidades de propietarios de Parque Mediterráneo y sólo dos contestaron: una a favor y otra en contra.

El 26 de abril, la asociación de vecinos de Parque Mediterráneo defendió que se mantuviera el jardín y se abriera un espacio sin árboles en el Parque del Oeste, junto al muro del jardín, para el acceso rápido de los bomberos.