Cientos de malagueños participaron ayer en una cadena humana alrededor del Banco de España para reclamar al Gobierno la derogación de la reforma de las pensiones y exigirle que las pensiones deben volver a revalorizarse con el IPC y garantizar de esta forma su poder adquisitivo.

La secretaria de la Igualdad y Políticas Sociales de UGT Málaga, María Adela Zafra Utrera, manifestó que «el poder adquisitivo sólo se puede considerar verdaderamente garantizado para los beneficiarios de pensiones mínimas y no contributivas».

«Aún para esos, la cuantía final del poder adquisitivo que puedan ganar es incierta, ya que dependerá de la subida final del IPC que puede comerse una parte importante de la mejora inicialmente esperada. Para el resto de los pensionistas, se experimentará una subida que en su mayoría significará la pérdida de capacidad adquisitiva en 2018, ya que lo más previsible es que la inflación final quede por encima», dijo.

Así, la dirigente sindical afirmó que la subida será del 1,5% para 1,5 millones de pensionistas, del 1% para 800.000, mientras que para el resto, unos 2,5 millones, sólo se producirá la subida inicial que les hizo el Gobierno de Rajoy de un 0,25%, lo que significa que, en resumen, casi cinco millones de ellos perderán poder adquisitivo.

Zafra aclaró que «la inmensa mayoría de las pensiones de viudedad, y especialmente las más bajas, no se verán beneficiadas en absoluto por la subida del porcentaje de la base reguladora. Teniendo en cuenta que una mayoría de ellas percibe el complemento hasta la cuantía mínima».

Objetivos de UGT

«Con la excusa de beneficiar a los pensionistas, se exime de la declaración en el IRPF a los perceptores de rentas de entre 12.000 y 18.000 euros», señaló la dirigente sindical, quien después afirmó que UGT «seguirá trabajando para impulsar un acuerdo definitivo sobre el mantenimiento del poder adquisitivo en el Pacto de Toledo, pedirá la convocatoria de la mesa de diálogo social para concretar medidas y reformas legales y continuará dando pasos y presionando para derogar la reforma de las pensiones de 2013».