El avistamiento de las carabelas portuguesas frente a las playas de Málaga este fin de semana ha alarmado a los bañistas, con la amenaza de cierre de playas justo a menos de un mes del inicio de la temporada de playa. Sin embargo, Jesús Bellido, biólogo del Aula del Mar, tranquiliza sobre esta invasión: "Por su ciclo biológico, lo previsible es que desaparezcan antes del comienzo de la temporada de baño (el 15 de junio)".

El viento de Levante está acercando a la costa a estos animales marinos, que desde marzo deambulan por el Mediterráneo Occidental. En Alicante, litoral al que más está afectando su presencia, se han tenido que cerrar centenares de playas, mientras que en Málaga empezaron a ser vistas el viernes en Nerja, extendiendo este fin de semana hasta la capital, aunque en menor número que en la costa levantina.

Bellido, no obstante, es optimista. Recuerda que las carabelas son animales de origen atlántico y la previsible subida de la temperatura del Mar Mediterráneo en estos días juega en contra de las carabelas, que además están llegando al final de su ciclo biológico. De hecho, recuerda que lo normal es que en abril dejen de tener presencia, comentando que es algo excepcional su presencia en mayo.

La amenaza de las carabelas portuguesas no es habitual en el Mediterráneo, ya que su hábitat natural es al norte del Atlántico y su entrada en el Mediterráneo se produjo de forma fortuita. Bellido apunta al "carrusel de tormentas que hubo en marzo, como 'Gisela' y 'Bruno", que arrastró un importante grupo dentro del Mediterráneo Occidental y que ha estado a merced de las corrientes marinas y los vientos. Es el viento de Levante el que ha provocado su acercamiento a la costa en los últimos días.

Peligros

Estos animales marinas no son especies mortales. Al menos no directamente. Es verdad que su picadura es tremendamente dolorosa, produce hinchazón en el miembro afectado e, incluso, puede provocar algunos desvanecimientos. Sin embargo, este veneno es raro que, por sí mismo, mate a alguien. Jesús Bellido sí advierte del riesgo que suponen "si pican a alguien nadando lejos de la costa", ya que provocaría su ahogamiento a causa de los síntomas de la picadura.

En el caso de recibir una picadura, este biólogo del Aula del Mar recomienda lavar rápidamente la zona afectada con agua de mar para eliminar cualquier resto de tentáculo y marcharse a un centro de salud u hospital para que sea tratado por un especialista.