El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, dinamitó ayer, en el pleno del debate sobre el estado de la ciudad, cualquier posibilidad de hablar de los problemas de la urbe, ya que escogió su primera intervención para soltar un bombazo: hará pública Limasa, la empresa de limpieza de la capital, al 100%. A partir de ahí, el resto del debate palideció bajo este anunció, alabado en bloque por la oposición de izquierdas, que se lo apuntó como tanto propio, y criticado por su socio de gobierno, Cs, que aseguró que su palabra «sirve para poco».

El regidor malagueño soltó la noticia al final de su discurso, por lo que los portavoces no pudieron reaccionar hasta su segunda intervención. Hace tan sólo unos meses, De la Torre propuso un modelo híbrido, haciendo pública la recogida de residuos y privada, la limpieza viaria. Ahora se desdice. Aseguró que la empresa ha trabajado bien estos meses. «Saben de mi empeño es hacer lo correcto, sin apriorismos ni normas», destacó, para añadir: «Por eso quiero anunciarles que, tras retomar y concluir el debate interno en el seno del grupo popular y alcanzar una posición común, vamos a proponer al pleno que Limasa».

Ello supondrá un ahorro, defendió, que repercutirá en un mejor servicio, «porque introducirá criterios de productividad -medidas por sistemas automáticos de control y por una empresa externa a efectos de calidad- y porque pondrá fin a una espiral de pleitos que conviene poner a cero».

La idea es alcanzar la máxima calidad. «Subrayo que la continuidad de este modelo de gestión pública estará sometida a los resultados de una o dos encuestas anuales que medirán la evolución de la satisfacción de los vecinos; si no hay satisfacción de los malagueños, que son los accionistas de la ciudad, habrá que cambiar el modelo. Por lo tanto, estamos hablando de un paso que puede ser reversible», señaló.

El portavoz municipal del PSOE y candidato a la alcaldía, Daniel Pérez, dijo: «¡Bienvenido, señor de la Torre! Asume usted una propuesta de los grupos de izquierda, pero no veo al señor Jiménez, ¿habrá dimitido?». Esto lo destacó Pérez porque el exedil de Sostenibilidad Medioambiental, ahora en Derechos Sociales, aseguró que dimitiría si algún día Limasa se hacía pública. De cualquier forma, Pérez señaló que los barrios están sucios, que De la Torre no es un buen gestor, que en Limasa se pagaba «dos veces supuestamente por el mismo concepto» a los socios privados, «los malagueños quieren las calles limpias, y eso sólo va a ser posible con planes de choque iniciales y políticas de mantenimiento, mediante esa Limasa pública donde se pueda invertir ese remanente que nos ahorraríamos de la privatización». «Un servicio esencial y público ha de ser municipal», insistió Pérez en su segunda intervención a lo largo del debate, que duró poco más de cinco horas, hasta las cuatro de la tarde.

El portavoz de Málaga para la Gente, Eduardo Zorrilla, también se felicitó de la victoria de los grupos de izquierda en este caso, mientras que el socio de gobierno de los populares, el portavoz de Ciudadanos, Juan Cassá, fue el único que criticó la decisión. «Su palabra sirve para poco, pero Cs siempre estará al lado de la democracia, respetamos la mayoría de este pleno, quieren una Limasa pública, nosotros estamos totalmente en contra, pero nos pondremos al lado de la ciudad; ojalá la Limasa pública sea un éxito, pero lo dudamos mucho».

El regidor hizo una lectura muy triunfalista del mandato, destacando que, a pesar de la crisis, la ciudad «ha sabido aprovechar sus oportunidades y contener sus debilidades», señaló la bonanza turística, de forma que el número de visitantes alojados en hoteles ha crecido un 184% entre 2005 y 2017, y destacó que Málaga ya es conocida como «la ciudad de los museos». Sacó pecho del Plan de Innovación Tecnológica, con 200 acciones para 2022, la red de incubadoras, que cobija a 300 autonómicos, el Polo Digital y la lucha contra el cambio climático.

Otros asuntos

También insistió en que desde 2000 el Ayuntamiento ha rehabilitado más de 270 edificios históricos (son más de 3.300 viviendas) y sacó pecho de la peatonalización del Centro y la resolución de la conexión puerto-ciudad. Aunque, eso sí, dijo que «mientras el paro no sea inferior al 5 o 6%, «no podremos estar satisfechos» y para ello hace falta una buena política de educación, sobre todo en Formación Profesional dual.

Defendió que su gobierno ha aumentado el gasto social de 31,7 millones en 2015 a 41 en 2018, que 54 empresas, desde 2015, han acudido a la oficina del inversor para implantarse o ampliar su presencia en la ciudad y que, de enero a mayo, se han otorgado licencias urbanísticas para proyectos que van a movilizar cerca de 400 millones de euros (en 2017 fueron 577 millones).

Hizo otros anuncios: su programa está en marcha al 80% (un 17% ejecutado, un 39%, en ejecución y un 22%, en curso), dijo que su intención es contar con un presupuesto en enero de 2019 (guante que recogió Cs), destacó que, de las seis grandes ciudades españoles, el IBI es el más bajo y valoró el pago a 8.400 proveedores de 343 millones de euros en una media de 14 días en 2017. Así, propuso a la Junta cuantificar las medidas y establecer un calendario para actuar en la Cuenca del Guadalhorce.

Otro anuncio importante fue que su equipo de gobierno va a usar todos los instrumentos del PGOU, y si es necesario lo modificará, para regular usos e intensidades de las viviendas turísticas, destacó que hay 18.000 plazas turísticas en pisos vacacionales, y pidió a la Junta que actualice la legislación de 2016 y que se coordine con los ayuntamientos. También ha dado instrucciones a Urbanismo para que, en el ámbito del plan general, dé prioridad a la búsqueda de espacios para oficinas, proyectos logísticos y hoteles

Reseñó también los proyectos que generan centralidades, como el de Repsol, Martiricos, Torre del Río o La Térmica y señaló como hito más destacable de su mandato la renovación del acuerdo con el Centre Pompidou por cinco años.

Daniel Pérez

Pérez, por su parte, hizo un discurso también de altura centrando en ofrecerse como alternativa clara a De la Torre: «Hoy enfrentamos dos modelos, entre el impulso de progreso que represento y el más de lo mismo que representa Paco de la Torre, o quien se esconde detrás, el verdadero candidato: Elías Bendodo». Su primera medida como alcalde será eliminar las plusvalías por herencia, prometió convertir el PTA, con viviendas, hoteles y servicios complementarios, mejorando la conectividad (extendiendo el metro y llevando el Cercanías); anunció que ayudará a que la ciudad se asome al mar soterrando el Paseo de los Curas y Muelle Heredia, así como otro tramo de la zona de la Alameda hasta el parque y haciendo peatonal el tránsito desde el puerto a calle Larios, soterrará con dinero municipal las vías del tren entre el puerto y la estación y luego pasará la cuenta al Gobierno y abogó por establecer requisitos y numerus clausus para los pisos vacacionales. Pérez se centró en destacar que es una alternativa.