Sin ganadores ni perdedores. O mejor dicho, con todos como perdedores. El concurso para contratar a la empresa que gestionará el CAC Málaga los próximos diez años va a ser hoy declarado desierto. Ésta es la propuesta aprobada ayer por la mesa de contratación que estudiaba las dos ofertas presentadas y que esta mañana debe ser ratificada en la junta de gobierno local.

La decisión se ha tomado apenas una semana después de que la mesa descartase la oferta de Unicaja, una de las dos que concurrían. En aquella ocasión, se argumentó que el objeto social de la entidad no incluía hacerse cargo de infraestructuras culturales y que el IAE no estaba en el epígrafe adecuado.

La decisión de dejar fuera a Unicaja sólo dejó sobre la mesa la oferta del otro aspirante, Gestión Cultural y Comunicación, actual responsable del CAC Málaga. Pero, finalmente, también queda descartada tras estudiarse su oferta económica.

Una vez aprobada la decisión de la mesa de contratación, habrá que decidir si se convoca un nuevo concurso con nuevas condiciones o se negocia directamente con las empresas especializadas.

Las razones esgrimidas por la mesa de contratación para descartar la oferta de Gestión Cultural y Comunicación se centran en diversos aspectos de la oferta económica como que "no especifica la pintura de la totalidad del edificio en el cuarto año de la concesión ni la reparación de los desperfectos". Además, indica que no hay un calendario de sustitución de mobiliario y mejoras técnicas y que el organigrama "no coincide con el presupuesto destinado a gastos de personal", al tiempo que el informe aclara que no están dotados varios departamentos. La ausencia de una relación detallada del vestuario del personal y no estar desglosado dicho personal son otros argumentos esgrimidos.