Quién lo diría a estas alturas de la temporada. El Xerez Deportivo, prácticamente desahuciado durante toda la Liga, se ha metido de lleno en la pugna por la salvación en la última jornada, en la que visitará el Reyno de Navarra para enfrentarse a un Atlético Osasuna que no se juega nada en el envite.

El equipo dirigido por el argentino Néstor Raúl Gorosito es el enemigo público número uno del Málaga para esta jornada final, ya que en el caso de un cuádruple o quíntuple empate con los xerecistas metidos en el ajo, el bloque malagueño tiene todas las de perder. Pero es que incluso el ´goal average´ del cuado gaditano es favorable frente a todos los demás equipos inmersos en la lucha por permanecer en Primera División, salvo ante el Racing de Santander. Eso sí, todas las opciones de Xerez pasan por una victoria ante el Osasuna en Pamplona, después del triunfo que cosechó ante el Zaragoza en Chapín (3-2).

Si el Málaga pugnaba hasta ahora por eludir el descenso, sobre todo, con el Racing, el Valladolid y el Tenerife, en la jornada que supone el epílogo para la Liga se suma un cuarto contrincante, como es el Xerez Deportivo.

En la primera vuelta, el Málaga sólo pudo empatar en Chapín (1-1), en un partido marcado por los errores del árbitro Álvarez Izquierdo, que anuló un gol legal del portugués Edinho, dio por válido un gol ilegal del Xerez, en el que un jugador había tocado el balón con la mano antes del remate e incluso hubo un penalti no pitado a favor de los malaguistas.

En la segunda vuelta, el Xerez arrancó un triunfo en La Rosaleda (2-4) después de adelantarse en el marcador, de la remontada del cuadro malaguista, de una ´pájara´ de juego del equipo local y de que el colegiado Velasco Carballo pitara dos penaltis a favor del bloque jerezano, uno de ellos por supuesta mano de Duda.

Casi todos los malaguistas, aficionados o integrantes de la plantilla, coinciden en que esta derrota sufrida ante el Xerez fue la que más daño anímico hizo al Málaga, ya que a partir de entonces el equipo entrenado por Juan Ramón Muñiz sólo ha sido capaz de ganar al Villarreal de doce partidos disputados y a la espera del Real Madrid.