Ya se ha hecho oficial el cambio en el Málaga. El 27 de julio era un día marcado en rojo en el calendario de todo el malaguismo, y al final ha llegado. Fernando Sanz ha dejado de ser presidente de la entidad de Martiricos tras la junta general de accionistas que se ha celebrado este mediodía en las oficinas de La Rosaleda. El nuevo mandatario del club será el jeque y propietario Abdullah Bin Nasser Al-Thani.

De hecho, Sanz ni siquiera estará en el nuevo consejo que se ha formado tras la junta. En la reunión, los antiguos consejeros han puesto su cargo a disposición del club y ninguno de ellos continuará. Los nuevos miembros de este consejo serán el propio jeque Al Thani, su 'mano derecha' Abdullah Ghubn, la abogada Yasmin Al-Al-Sahoud y su padre, Taysir Al-Sahoud.

En su despedida, Fernando Sanz ha dejado entrever que no seguirá vinculado al club del que fue presidente durante cuatro años, si bien este extremo no está confirmado. A su llegada, el Málaga era poco menos que un barco a la deriva y a punto de hundirse, ahogado por las deudas y amenazado por la quiebra económica. Tras un año de sufrimiento a punto de bajar a Segunda B, el equipo logró el ascenso a Primera, donde se ha mantenido dos años con uno de los presupuestos más bajos.

El hasta hoy presidente se ha mostrado "satisfecho" por dejar el club en buena salud y con las cuentas saneadas, y ha querido agradecer a la afición todo el cariño que le ha mostrado. "Me siento un privilegiado por tanto cariño", ha dicho. Además, ha deseado suerte al jeque Al-Thani. "Su suerte será la nuestra. Soy malaguista hasta la muerte y le deseo lo mejor"; ha concluido.