Quien juega con fuego... acaba en la Champions
El Málaga durmió ayer en puestos de Liga de Campeones después de doblegar (1-0) al Levante merced a un solitario gol de Rondón en el 51’. El Zhar, con un misil que se marchó rozando la escuadra, pudo poner en jaque el conformismo malaguista tras el gol.
Un domingo más, el Málaga se levanta de la cama cuarto. Con los deberes hechos y en puestos Champions. Vamos, lo que se le exige a un equipo como éste. El equipo de Pellegrini se impuso a un Levante luchador, bien armado atrás y que salía a la contra con mucha velocidad. El Málaga fue superior, y mereció la victoria, la tercera consecutiva que sirve para lanzar al equipo a Europa. Al final, el resultado y los tres puntos es lo que cuenta, pero también es cierto que hubo varios factores que me hicieron temer por el empate levantinista. Después de marcar Rondón el Málaga se conformó, sufrió un bajón físico alarmante, y la poca eficacia de Rondón de cara al gol (necesita cinco ocasiones para meter una) tampoco ayuda. Además, El Zhar metió el miedo en las gradas con ese zambombazo en el descuento... pero nadie dijo que esto iba a ser fácil.
Envidia por lo que vivió el Athletic en Old Trafford
El Athletic Club de Bilbao escribió el pasado jueves una de sus páginas más brillantes de su historia al doblegar al Manchester United (2-3) en el mítico «Teatro de los Sueños», con una exhibición de fútbol y con miles de aficionados rojiblancos en la grada. Envidia.
Lo que sucedió el pasado jueves en la eliminatoria de octavos de final de la Europa League entre Manchester United y Athletic Club engrandece más si cabe este bendito deporte. No sólo por el resultado final y por el baño futbolístico que dieron los de Bielsa a uno de los clubes más poderosos del planeta, que también. Sino por la perfecta comunión entre el equipo rojiblanco y su afición. Lo reconozco, yo sentí envidia al ver aquello y no veo el momento de acompañar al Málaga paseando su escudo por los estadios con más solera del Viejo Continente.
Sinceramente, cuando Llorente hacía el primero para los leones, pensé en Rondón haciendo lo mismo; cuando De Marcos culminó el «jugadón» del segundo gol, no pude resistirme y pensar en Joaquín y Cazorla liándose a la experimentada defensa Red... y cuando Muniain materializó la machada del tercer gol, sólo se me venía a la cabeza a Isco haciendo algo similar. Y todo con la afición blanquiazul coreando el ¡Málaga, Málaga! bajo la acústica perfecta del teatro de los sueños... Soñar es gratis ¿no?
El ostracismo del mejor goleador del siglo XXI
Van Nistelrooy no está pasando por su mejor momento como futbolista. Ni mucho menos. El holandés llegó en verano con la intención de ayudar al Málaga en su reto por entrar en Europa, pero nada está siendo como él creía. Pellegrini se ha olvidado de Ruud.
Cada semana que pasa de esta temporada 2001/12 tengo más claro la caballerosidad y profesionalidad de Ruud Van Nistelrooy es intachable, pero tampoco se me escapa que su carrera como futbolista, al menos al máximo nivel, está apagándose. Van Gol fue el primer gran fichaje del Málaga durante el pasado verano, llegaba al Málaga uno de los mejores delanteros de la historia del fútbol y un reclamo de lujo para que otros jugadores eligieran al equipo blanquiazul como destino. Pues bien, parece que de las dos, se ha quedado sólo en lo segundo. Pellegrini tiró de él en el primer tramo de la temporada, pero pronto se vio que por Van The Man también pasan los años. Lleva cuatro partidos sin participar un solo minuto y el domingo el Málaga visita el Bernabéu, uno de los estadios en los que el holandés ha forjado su leyenda de goleador insaciable. Ya jugó allí en Copa... ¿Tendrá un gesto Pellegrini con el mejor goleador de la primera década de este siglo?
LA PREGUNTA IMPERTINENTE: ¿Cuánto tardará Baptista en conceder su primera entrevista en Brasil?LA PREGUNTA IMPERTINENTE:
