El Real Madrid vuelve a cruzarse el camino del Málaga CF para cargar de sueños y esperanzas las ilusiones malaguistas. La deuda histórica que el conjunto blanquiazul tiene en el Santiago Bernabéu es una losa demasiado pesada que es recordada temporada tras temporada. Un golpe en la moral de un equipo que ha hecho méritos suficientes como para haber estrenado, de una vez por todas, su casillero de victorias en el mítico Chamartín.

El próximo domingo, el peso de la historia no recaerá sobre los jugadores blanquiazules. Este Málaga tiene muy poco que ver con el que la historia ha contemplado a lo largo de sus años, pero eso no evita que la victoria siga siendo un logro muy complicado de alcanzar.

Hasta 30 visitas ha realizado el CD Málaga y el Málaga CF en Liga. En ellas nunca ha obtenido la victoria y sólo ha cosechado cinco empates. El balance goleador también es demoledor de 18 goles a favor por 72 en contra.

Pero la historia más reciente, la de los últimas diez temporada que el Málaga ha estado en Primera División con la actual denominación, también es esquiva con los malaguistas. En diez visitas sólo se ha cosechado un empate. Fue en la 2001/02, con un gol con el trasero de Fernando Sanz. Aquella noche, el marcaje del Gato Romero a Zidane fue clave en el empate.

Las alegrías han estado siempre cerca de regresar en el avión malaguista, pese a que al final el resultado haya sido esquivo. El primer año del Málaga CF en la elite, el Madrid ganó con un golpe de suerte. Rolando Zárate, hermano del exmalaguista Ariel Zárate, salvó los muebles de los blancos, cargados de suplentes por las lesiones y con Vicente del Bosque en el banquillo.

Un año después, el Málaga ya asentado en la categoría intentó asaltar el Bernabéu. Apunto estuvo con un partido cargado de goles (4-3). Roteta, Dely y Darío llevaron la ilusión a la grada, pero la pegada blanca hizo efecto.

En la 2002/03, el Madrid impuso su dominio ante un Málaga venido a menos. 5-1 final con un tanto del malagueño Manu Sánchez, que también estuvo en la disciplina del Real Madrid. En ese mismo encuentro, el 2-0 fue obra de Raúl en claro fuera de juego.

En los años siguiente, el Málaga consiguió derrotas «dignas» por la mínima. El 2-1 en la 03/04 con gol de José Juan Luque; el 1-0 en la 04/05 y el 2-1 de la 05/06, con tanto de Ricardo Bovio. Esa temporada, el Málaga descendió matemáticamente a la siguiente jornada en La Rosaleda contra el Racing de Santander.

En la vuelta a Primera tras el éxodo de dos curso en Segunda volvió a mostrar a un Málaga osado y peligroso. El 4-3 de la campaña 2008/09 aún está fresco en la memoria de los malaguistas. Eliseu, Baha y Apoño -de penalti- rozaron la proeza. Pero los cuatro zarpazos de Higuaín, uno de ellos gracias a un penalti inexistente, dilapidaron las opciones malaguistas.

Con Muñiz, el Málaga cayó 2-0 con doblete de Cristiano y con honroso partido. No fue así el curso pasado, donde Pellegrini entregó la cuchara y el conjunto de Mourinho le pintó la cara con un 7-0. El 3-2 de Copa hace un par de meses es un buen ejemplo para comenzar a creer en la victoria.