Como en el viejo oeste, como en las películas de vaqueros, el duelo al sol está brindado. En un lado de la calle está el Málaga, con su rapidez y seguridad para desenfundar. Los blanquiazules acumulan víctimas en su historial reciente y no tienen miedo a aumentar su leyenda. En el otro lado de la acera, el Espanyol, que poco a poco se está haciendo un hueco, y quiere acabar con el sueño malaguista.

Ambos son rivales directos por entrar en Europa el próximo curso y a tenor de cómo está evolucionando el campeonato, casi se podría decir que sólo puede quedar uno tras el encuentro de esta tarde, que a fin de cuentas es vital para el objetivo de ambos.

Visita el Málaga esta tarde un escenario complicado. El Espanyol pondrá a prueba la madurez malaguista para intentar evitar que los blanquiazules cierren una semana redonda. El equipo de Pellegrini salió algo más que airoso del Bernabéu, donde pese a que el marcador señaló un empate, el vencedor moral fueron los malagueños. Derrotó con una aplastante solvencia y convicción al Rayo Vallecano hace tres noches y ahora se presenta en Cornellá-El Prat sin haber saciado aún su hambre de victorias.

El nivel de calidad y de juego que ha alcanzado el equipo de Manuel Pellegrini invita al optimismo. Europa se ve mucho más cerca que nunca y la lucha por alcanzar la tercera plaza está cobrando vida a medida que la temporada avanza y los resultados benefician.

De conseguir el triunfo esta tarde, el Málaga continuaría en su escalada de posiciones y dejaría muy tocado a un rival directo como el Espanyol. De no ser así, el conjunto de Manuel Pellegrini mantendría la quinta posición ya que mantiene una renta de cuatro puntos precisamente con el Espanyol, que es sexto. De hecho, el empate no sería del todo negativo ya que mantendría la distancia y el average malaguista con los espanyolistas, ya que en la primera vuelta acabó 2-1.

Sin embargo, los contratiempos no están permitiendo un caminar tranquilo al Málaga CF. A las importantes bajas con las que cuenta la plantilla con Baptista y Toulalan se unió ayer Joaquín por una lesión muscular que lo tendrá otro buen periodo de tiempo fuera de los terrenos de juego.

Su sustituto apunta a que será Sebas Fernández, que está cumpliendo cada vez que salta al terreno de juego. El uruguayo está fino y quiere aprovechar esta nueva oportunidad.

Para la cita en la Ciudad Condal Pellegrini convocó ayer a 20 hombres en los que destacó la presencia de Portillo por el lesionado Joaquín. En total, todos los que se embarcaron ayer en el avión con destino a Europa fueron Gámez, Weligton, Demichelis, Camacho, Van Nistelrooy, Sebas, Cazorla, Willy Caballero, Mathijsen, Monreal, Maresca, Duda, Eliseu, Buonanotte, Sergio Sánchez, Isco, Rondón, Kameni, Recio y Portillo. El técnico chileno, eso sí, deberá hacer dos descartes antes de que comience el partido.

En el encuentro de la primera vuelta ya quedó patente la igualdad entre los dos conjuntos. El envite se resolvió con un penalti discutible sobre Romaric que transformó Apoño.

El Espanyol también aspira a lograr una plaza europea al final de curso. De hecho, los periquitos se han reforzado muy bien en el pasado mercado invernal con las importantes llegadas de Kalu Uche y Coutinho, la auténtica sensación en los pocos meses que lleva en el Espanyol.

Para la cita, Mauricio Pochettino recupera a Verdú, uno de los hombres referencias en el juego ofensivo espanyolista. El habilidosos Frederic Weiss o la potencia de Romaric en la medular son algunas de las armas del Espanyol, que intentará hacer valer su factor campo para intentar sorprender al Málaga.