El proyecto del Málaga CF se está confirmando como muy ilusionante. Aunque empezamos un poco cojeando y parecía que el equipo no iba a dar los resultados esperados, es una alegría muy grande poder estar ahora mismo en puestos Champions y todo lo que eso conlleva. Si el Málaga sigue apostando por el buen fútbol, el de toque que impone Pellegrini que ya se veía en el Villarreal y en el Real Madrid, el equipo se colará en Liga de Campeones. Cuenta con jugadores de calidad como Cazorla, Isco y Joaquín y manteniendo su filosofía de fútbol puede afianzar su posición de Champions.
Se está cumpliendo el objetivo. Se hizo una gran inversión el pasado verano, se contrató a jugadores expertos y curtidos en otras batallas, que ya habían jugado incluso Champions, y cuando una persona hace una inversión de este tipo está acostumbrada al éxito. Quizás la afición no estamos acostumbrados a luchar por estos objetivos, pero tenemos una gran plantilla, un gran presidente y un magnífico cuerpo técnico.
Afortunadamente, el Málaga tiene una gran afición que empuja cada fin de semana. Entre el buen juego del Málaga y la entrega de la grada, seguro que este año vamos a tener un buen resultado final. Es cierto que quizás no esperábamos estar tan arriba porque en nuestra historia no hemos aspirado a nada grande, pero ahora se están viendo cosas importantes.
Lo que sí es verdad es que con la euforia hay que tener cuidado. Todos somos humanos y podemos fallar. El ejemplo más claro es el Real Madrid, que hace unos días tenía diez puntos sobre el Barcelona, estaba eufórico, y ahora está a seis. No nos podemos relajar en ningún momento. Los jugadores saben que no se pueden dejar llevar por ello. Pero el aficionado sí es más eufórico. Aunque tenemos que estar trabajando para que el equipo consiga sus objetivos. El empate en el Bernabéu y la victoria en Cornellá contra el Espanyol nos ha colado en Champions y la alegría es máxima, pero hay que ser conscientes que pueden venir días malos.
Como por ejemplos las lesiones. Willy, Joaquín, Baptista y Toulalan son la artillería pesada y Dios quiera que el resto no tengan problemas. En este sentido hay que ser inteligentes y dosificar bien a los jugadores. Y esperar la recuperación de los lesionados. Ahora hay que encomendarse a San Cazorla y a San Isco para que nos guíen. Ellos son dos jugadores que me tienen enamorado. Son un espectáculo. En el mundo del arte hay como en todo, profesionales y artistas. En el mundo del fútbol también los hay. A estos dos los ves que tienen magia. Tienen calidad, toque de balón, sutileza... Isco es una auténtica maravilla. Pero será complicado mantenerlo porque pronto vendrá un grande a ficharlo. Él tendrá que valorar las opciones.
Por último, me gustaría reflexionar sobre Pellegrini. Yo soy muy del chileno. Soy admirador de él. Independientemente de ganar, él conserva su filosofía de fútbol, buen juego y estética. Es un caballero del fútbol. Y su personalidad se ve reflejada en el juego de su equipo. Hay juego directo y de calidad. Y sabes que en cualquier momento va a suceder algo. A mí Pellegrini me gusta mucho y el mensaje para la afición es que si aplaudimos cuando ganamos, también hay que apoyarlo cuando no va bien. Si se lesionan ciertos jugadores, él no tiene culpa. Pero la afición siempre tiene que seguir adelante para que el proyecto triunfe. Y no hay que hacer cambios de entrenador a mitad de temporada. Ahora ha dado con la tecla. Estamos viendo un gran fútbol que hace años que no veíamos aquí. Hay que disfrutarlo.
