Los fatídicos últimos 10 minutos que vivió el Málaga CF contra el Villarreal el pasado jueves en El Madrigal, remontada del conjunto amarillo y expulsión del guardameta Kameni incluidas, no es algo nuevo para los pupilos de Manuel Pellegrini en la presente temporada. El gafe malaguista en los instantes finales ha salido a relucir en otras tres ocasiones además de la del submarino, lo que supone un total de 12 puntos perdidos, que de tenerlos en su haber, el Málaga sería líder destacado de la denominada «otra Liga».

La «maldición» comenzó en San Sebastián el pasado 4 de diciembre, cuando la Real Sociedad conseguía remontar al Málaga un 1-2 en el minuto 89 y 90. En un partido que el Málaga dominó de principio a fin al conjunto de Montainer pese a que éstos se adelantaran con un gol en propia puerta de Demichelis. Rondón y Van Nistelrooy daban la vuelta al marcador y cuando todo parecía que los tres puntos volaban para la Costa del Sol, Carlos Vela e Ifrán remontaban un encuentro que tenían completamente perdido.

Pero mucho más lejos de desaparecer, la «maldición» se manifestó por segunda vez en El Molinón durante el último partido de la primera vuelta. Van Nistelrooy conseguía en el minuto 88 un gol que permitía empatar el tanto del esportinguista Gálvez, pero cuando todo hacía indicar que el reparto de puntos era lo más lógico, Trejo, en el descuento, se sacó un misil desde fuera del área, que volvió a dejar con cara de tontos a todo el malaguismo.

Pero ni corto ni perezoso, la dichosa maldición de los últimos minutos reapareció en el derbi contra el Granada. Ighalo adelantó a los nazaríes en el 57, aunque Rondón empató 10 minutos más tarde. La pesadilla regresaba en el 81´ cuando Íñigo López aprovechaba un rechazo en el área de Caballero para colocar el definitivo 2-1 en el electrónico.

La última vez en manifestarse fue el jueves contra el Villarreal, cuando los fantasmas hicieron acto de presencia en el 83´ y el 90´ con los tantos de Marcos Senna y Hernán Pérez.