El esprint final por la Liga también prepara una corta carrera de velocidad para dos de las estrellas malaguistas, que aprietan al máximo para ayudar al equipo antes de la clausura del campeonato. Tanto Joaquín Sánchez como Julio Baptista están ya en el tramo final de su recuperación y podrán ser de la partida en los próximos compromisos del conjunto blanquiazul. Una magnífica noticia para Manuel Pellegrini que podrá contar con estos «refuerzos de primavera» para las cinco finales que restan.

Ésa es, al menos, la intención de ambos jugadores que se han esforzado al máximo en sus respectivas rehabilitaciones con vistas a reaparecer cuanto antes. Aunque, claro está, ambos deberán recibir el visto bueno del cuerpo médico, para evitar recaídas, y del entrenador malaguista, que debe de verlos aptos y en buenas condiciones físicas para ser competitivos y para aportar al equipo.

La de Joaquín era una noticia que se esperaba más pronto que tarde. El del Puerto de Santa María lleva casi un mes en el dique seco tras sufrir una rotura de grado dos en el recto anterior del cuádriceps de la pierna derecha. No fue una recaída de su lesión anterior, que también le tuvo algo más de mes y medio apartado de los terrenos de juego, pero ha sido otro inoportuno bache en su puesta a punto, máxime cuando estaba ofreciendo un nivel espectacular justo antes de su lesión. El exvalencianista se lesionó tras el encuentro contra el Rayo Vallecano y ya no viajó hasta Cornellá-El Prat. Sin Joaquín, el Málaga ha disputado por el momento cinco encuentros en los que ha ganado dos, ha empatado uno y ha perdido otros dos.

En total, Joaquín suma ya 25 días. Se esperaba que estuviera contra el Villarreal o la Real Sociedad, pero su recuperación no ha sido tan rápida como en un principio se pronosticó. Ahora, su próximo objetivo es acudir a Pamplona en la lista de convocados y estar al cien por cien contra el Valencia, en La Rosaleda y contra su exequipo. El gaditano tiene previsto incorporarse a la dinámica del equipo esta misma semana, por lo que su presencia en el Reyno de Navarra no es descabellada.

Por lo pronto, el extremo se ejercitó ayer en el Estadio de Atletismo junto a otros compañeros en una sesión voluntaria, ya que la plantilla tenía previsto descansar. Pero Joaquín tiene ganas de reaparecer cuanto antes y ayer acudió para seguir evolucionando en su puesta a punto. Junto al del Puerto de Santa María también acudieron los porteros Kameni, Pol y Willy Caballero –que al igual que Joaquín, realizó tareas de recuperación–, y los hombres de campo como Sebas Fernández, Eliseu, Buonanotte, Rondón, Juanmi, Portillo y Recio.

Baptista llega mañana. La otra estrella que está en la parrilla de salida para reaparecer es Julio Baptista. El delantero brasileño tiene previsto aterrizar mañana jueves en la capital de la Costa del Sol tras su rehabilitación en Sao Paulo, junto a sus médicos de confianza. La «Bestia», eso sí, llegará también en un estado físico que es toda una incógnita, pero desde Brasil apuntan que su recuperación está bien encaminada y que su trabajo en los últimos días ha ido enfocado también a la reaparición, cuanto antes, sobre el terreno de juego y no sólo para curar su rotura en la unión miotendinosa del sóleo derecho.

El problema es que Baptista no juega con la camiseta del Málaga un partido oficial desde el pasado 1 de octubre, cuando marcó el gol de la victoria sobre el Getafe de una espectacular chilena. Su presencia, de estar apto médicamente, sería también un gran interrogante para el entrenador ya que suma muchos meses alejado de los terrenos de juego. La falta del ritmo, la ausencia de «chispa» competitiva o, incluso, la competencia en su puesto pueden ser un hándicap contra el brasileño. Pero Baptista quiere aportar al equipo desde el mismo momento que pise tierra española.

Por lo tanto, el «19» del Málaga aterrizará mañana jueves en el aeropuerto de la capital y comenzará a ejercitarse con el grupo en breve tras una evaluación médica previa. Se antoja complicado que el brasileño pueda estar para el encuentro contra Osasuna del próximo lunes. Pese a que el partido es de máxima importancia para el Málaga, Manuel Pellegrini podría optar por reservarlo para el duelo contra el Valencia, que también será decisivo para el futuro deportivo del club. Ahí sí estará Baptista en plenitud de facultades para intentar ayudar al Málaga en la lucha por la tercera plaza.