Fútbol, fútbol y más fútbol. Es lo que le espera al aficionado blanquiazul el próximo curso, pero también lo que sufrirán los jugadores malaguistas. La carga de partidos que se avecina para la temporada que arrancará en dos meses será mucho mayor que en cursos pasados. De hecho, el equipo de Manuel Pellegrini disputará, como mínimo, 48 encuentros repartidos en las tres competiciones en las que estará: Liga, Copa del Rey y competición europea.

Los 38 encuentros de la próxima edición liguera están asegurados, pero además, el Málaga también jugará, como mínimo, la primera ronda de la Copa del Rey, por lo que serán otros dos encuentros. En Europa, el equipo blanquiazul también tiene confirmados ocho encuentros repartidos en los dos de la fase previa para disputar la Liga de Campeones y los seis de la liguilla, que si accede a la Champions serán del máximo nivel y si no supera la fase previa jugará la Liga Europa. Lo normal sería que el Málaga avanzase en alguna de las dos competiciones que tiene abiertas, como por ejemplo la Copa del Rey, que jugará contra un equipo de Segunda División B al disputar competición europea.

Estos 48 partidos como mínimo auguran una temporada cargada de duelos y con poco tiempo para entrenar y perfeccionar los puntos débiles. El descanso será vital para refrescar las piernas, que estarán también sobrecargadas de viajes. Es por ello que la pretemporada cobra un papel fundamental este verano. Los hombres del Ingeniero deberán acaparar en pocos días todos los conceptos futbolísticos del chileno para ponerlos en práctica cuanto antes. El entendimiento, aunque continuarán la mayoría de los componentes, será un punto decisivo para el buen funcionamiento. Y la preparación física irá encaminada a fortalecer la resistencia de los malaguistas ante la marcada carga de partidos.

Otro factor importante a tener en cuenta será el número de jugadores con los que contará Pellegrini. Sin duda, el chileno no podrá contar con una plantilla corta. Las lesiones y las sanciones puede ser un hándicap importante con el paso de los meses y para ello, será indispensable disponer de un buen número de efectivos.

El fondo de armario será decisivo en este aspecto para dar refresco durante la competición. E incluso la cantera tendrá un papel más protagonista que este último año. Sin duda, llega un curso largo y complicado para los malaguistas. Muchos deberán cambiar el chip con respecto a años anteriores. Y es que el Málaga, el curso pasado jugó 42 partidos oficiales. Pero el Athletic, en situación similar a la malaguista, llegó a jugar hasta 64 partidos.