El paso al frente, la voz que se esperaba en el malaguismo desde hace días no llegó por parte del Málaga CF sino de los representantes e instituciones de la ciudad. Tanto el Ayuntamiento de Málaga como la Diputación Provincial dieron ayer un espaldarazo a la gestión del conjunto blanquiazul y a sus dirigentes con una afirmaciones contundentes y cargadas de peso. Un alivio y un flotador para la afición que tan desamparada y desconcertada se encontraba en los últimos días.
El acto tuvo lugar ayer en las taquillas de La Rosaleda. El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y el presidente de la Diputación Provincial de Málaga, Elías Bendodo, acudieron al estadio para renovar, como es habitual cada año, el abono blanquiazul. En la comitiva, junto a ellos, también estuvieron presentes el concejal de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Málaga, Damián Caneda, y la diputada provincial de Cultura y Deporte, Marina Bravo. Francisco Martín Aguilar ejerció de anfitrión malaguista junto a Jesús Nuño, asesor de la presidencia y Vicente Casado, director del área de desarrollo.
Pero el momento más esperado llegó cuando el alcalde y el presidente de la Diputación atendieron a los medios allí congregados. Evidentemente fueron cuestionados por el día a día de la entidad de Martiricos y por las últimas informaciones salpicadas por impagos, denuncias y retrasos. De la Torre rompió una lanza en favor de los dirigentes cataríes. «Queremos mostrar nuestro apoyo al club, aunque sabemos que ahora no lo necesita, ya que la presión y demanda de abonos es muy grande y según los directivos están rozando los 26.500, que es su cifra tope. El club está en buenas manos, ha demostrado solvencia y se han hecho buenos resultados. Y estamos seguros de que el club va a seguir en esa dirección. No hay que darle mayor trascendencia, la plantilla está tranquila, segura y con mucha ambición», aseguraba el dirigente malagueño.
Bendodo, por su parte, fue más contundente. «Un año más venimos a renovar nuestros compromisos como malaguistas. También queremos que sea un gesto de apoyo a la gestión que está haciendo el club. Ya quisieran muchos clubes de España tener los dirigentes que tenemos nosotros, con la solvencia económica que manejan en el día a día. Por tanto, animar a los dirigentes del club a seguir en esta misma línea, y que el Málaga este año como equipo de Champions League pueda estar en lo más alto de Europa», reconoció el presidente de la Diputación Provincial.
Por lo demás, ayer se terminaron de retirar las denuncias que los cuatro jugadores habían puesto al Málaga CF. Sin embargo, se sigue a la espera de que Abdullah Ghubn llegue a la Costa del Sol. Hay demasiados pagos pendientes y cuestiones que resolver que necesitan la atención del vicepresidente y hombre fuerte del club. Su desembarco parece inminente, pero no termina de producirse.
