El Málaga se estrenó con derrota en la presente pretemporada tras caer por 2-0 en el partido de presentación del Xerez ante su afición en Chapín. José Mari y Maldonado fueron los encargados de ejecutar en la segunda parte a un Málaga cansado y que evidenció algunos desajustes defensivos que le costaron caro.

El encuentro fue el típico amistoso de preparación en el que Manuel Pellegrini pudo comprobar el pobre olfato goleador de sus línea de ataque y probó satisfactoriamente a Xavi Torres junto a Toulalan en la medular.

Pronto el Málaga comenzó a demostrar su superioridad técnica ante un rival que se acercaba al área de Willy Caballero (qué bueno que volviste) mediante acciones aisladas a balón parado. El calor y el poco público en las gradas no acompañaron a que los jugadores ofreciesen un gran espectáculo.

Las piernas se notaron pesadas en los jugadores después de las palizas físicas del primer stage en Campoamor. No hay que olvidar que el de ayer era el primer test de la pretemporada y aún los pupilos de Pellegrini se encuentran aclimatándose a la competición.

La primera parte transcurrió con el dominio absoluto del Málaga, dueño y señor del esférico. Pellegrini situó la línea defensiva muy adelantada, con los laterales Monreal y Jurado muy activos. Gran noticia la del canterano en su vuelta al primer equipo en el lateral derecho, después de lesionarse la temporada pasada de gravedad.

Pese al dominio blanquiazul (ayer de verde eléctrico), al conjunto de Pellegrini le costaba decidir las jugadas en la línea de tres cuartos. Rondón en dos acciones aisladas tuvo la oportunidad de inaugurar su casillero goleador, pero el vinotinto mostró su misma irregularidad a la hora de ver puerta que en la temporada pasada.

El Xerez de Esteban Vigo se desperezó en el minuto 20 y siempre por su banda izquierda, con el escurridizo José Vega, planteó problemas a la zaga malaguista.

Pero la dupla Xavi Torres-Toulalan (inédita en el Málaga) emergió y secuestró el centro del campo de Chapín. Sólo faltaba ese último pase para Rondón, Joaquín, Duda o Portillo que permitiera abrir la lata.

Joaquín, que ayer cumplió 31 años, quiso celebrarlo con un golito. Lo intento todo: a balón parado e incluso se disfrazó de Messi para realizar un eslalom en el que superó hasta cuatro jugadores azules hasta quedarse ante Toni y al que intentó superar con una sutil vaselina. Genio y figura el extremo portuense.

Jurado continuó siendo la mejor noticia de un Málaga asfixiado a estas alturas de pretemporada. El canterano se hizo amo del carril derecho de Chapín, subió la banda con mucho criterio y colocó varios centros a los que Rondón no fue capaz de llegar. Además, durante toda la primera parte frenó con garantías a José Vega, el mejor jugador local durante los primeros 45 minutos.

Segunda parte diferente

En la reanudación, Esteban Vigo se encargó de darle al partido más aspecto de amistoso si cabe sustituyendo a todos sus hombres de campo y con los pocos aficionados aún tomando asiento tras tomar un refrigerio, el Xerez se adelantó en el marcador. Emana pilló dormida a la zaga malaguista, controló dentro del área y le dio en bandeja el gol al incombustible José Mari, que no dudó ante Willy.

Pellegrini no fue tan drástico como el «Boquerón» y sólo realizó dos sustituciones en el descanso. El «Ingeniero» dio entrada a Sebas y Maresca por Duda y Xavi Torres, respectivamente.

El Málaga, sin inmutarse por el tanto local, volvió a adueñarse del esférico, pero no culminaba sus jugadas con un fallón Rondón. El ariete venezolano, pese a su entrega, fue el mismo jugador errático de la temporada pasada. No hay que alarmarse, el de ayer fue el primer test del curso y aún necesita minutos, como el resto de sus compañeros.

Pese a cambiar a todos sus hombres, el Xerez siguió con la misma imagen de la primera parte: ordenado atrás y saliendo a la contra con velocidad. Así fue como llegó el segundo gol jerezano. Enrique se lució superando a Monreal, vio solo a Emana, que levantó la cabeza y con un pase de la muerte sirvió a Maldonado para ampliar distancias en el marcador.

El «Ingeniero» se percató del cansancio de sus hombres y realizó cuatro cambios. Buonanotte y Camacho dieron aire al ataque malacitano, pero no llegaba el gol. Poco después, Pellegrini tiró de Juanmi a 20 minutos del final para intentar una remontada que se antojaba muy cuesta arriba.

El partido murió con el 2-0 en el electrónico. El Málaga como es normal a estas alturas, aún está muy verde y necesita a Cazorla y varios fichajes. Al menos, pudieron olvidarse por un rato de temas extradeportivos.