El jugador malaguista Isco Alarcón, que no tuvo una buena actuación en los Juegos Olímpicos, donde la selección española no ganó un solo partido, señaló ayer en rueda de prensa que su primera intención es quedarse en el Málaga CF, pero también avisó que si los dirigentes le comunican la necesidad de traspasarlo, dada la delicada situación económica, difícilmente podría negarse.

«Si el club decide que me tengo que ir, no tengo palabra ahí», expresó el centrocampista, que a pesar de las semanas convulsas que vive la entidad de Martiricos, se muestra ilusionado ante la temporada 2012/2013, que está a punto de comenzar.

«Durante estos días he visto muy bien al equipo. Estamos con ganas de empezar esta temporada. Se presenta bonita», indicó el benalmadense, que ha tenido menos vacaciones que sus compañeros. Respecto al rival que le pueda tocar al Málaga en el sorteo, Isco dijo: «Cualquier equipo será complicado en la previa de la Champions. Estamos todos con muchas ganas de empezar».

El joven futbolista tiene claro lo que precisa el equipo en estos momentos de incertidumbre sobre el futuro de la entidad. «Necesitamos el apoyo y el cariño de la afición».