Si hasta ahora el Málaga se movía con soltura en las dos competiciones, Liga y Champions, el último traspié del conjunto malagueño en casa ante el Rayo, después de una semana anormal según Manuel Pellegrini, nos demuestra que en el fútbol no hay rivales grandes y pequeños, que las distancias futbolísticas se han acortado para lo bueno y para lo malo. Por eso, a pesar del mal juego desarrollado el pasado sábado, en uno de los peores partidos del Málaga desde hace bastante tiempo, seguimos creyendo en este equipo, en este grupo y en este entrenador.

Vamos a uno de los campos mas emblemáticos de Europa, con un historial avasallador y un recuerdo de alineaciones del AC Milan con jugadores históricos: Gullit, Baresi, Maldini, Van Basten, Costacurta, Pirlo... y así hasta agotar una lista interminable de grandes figuras.

Pero amigos: ¡Éste es el Málaga de la Champions! Es un equipo que ha sorprendido tanto a los que no le conocían en el resto de Europa como a nosotros mismos, con la tranquilidad de saber que tiene intactas las opciones de pasar a octavos de final de esta competición. El conjunto italiano sí se juega mucho en el envite y que a poco que Isco, Joaquín, Saviola y compañía estén entonados, le van a dar un susto de «muy señor mío» al equipo transalpino. Y eso a pesar de que seguramente nos encontraremos a un Milan distinto al de La Rosaleda, mucho más entonado en la competición casera.

El sueño que comenzó en Grecia puede continuar esta noche en San Siro y acallar así todos los comentarios injustos que esta semana han surgido alrededor de los jugadores. Esta noche, a disfrutar de ver al Málaga jugando un partido de Champions en Italia y ante el AC Milan, todo un lujo al alcance de muy pocos equipos españoles.

[Fernando Rodríguez es exjugador del CD Málaga]