El Málaga se presenta esta tarde en el gélido y desapacible Coliseum Alfonso Pérez de Getafe con la intención de mantener el subidón de adrenalina y energía que le dio al malaguismo la victoria sobre el Valencia la pasada jornada por cuatro goles a cero.

Llega el conjunto de Pellegrini, por lo tanto, crecido al duelo con los azulones. Se encuentra en su máxima expresión tras volver a ocupar puestos Champions en Liga, clasificado para octavos en la Liga de Campeones y acceder -con más pena que gloria- a octavos de Copa del Rey. Además, el juego alegre y vistoso del Málaga recuperó su sentido y su frescura contra los «che» en un partido para recordar. Es un presente de color de rosa en lo que concierne al aspecto deportivo.

Ahora, el escollo es el Getafe. Los azulones se han convertido en un conjunto fuerte y aseado en las últimas jornadas. Amenazan puestos europeos y acumulan dos victorias consecutivas en Liga. De hecho, sólo se encuentran a tres puntos del conjunto blanquiazul en la clasificación.

El Getafe, con un marcado acento nacional en su once -en teoría Abdel Barrada será el único extranjero que salga de inicio-, se ha subido con rapidez al «carro» de los aspirantes a Europa. Además, en los duelos entre ambos equipos en las últimas temporadas hay miga. Desde victorias en el último suspiro con chilenas estratosféricas a goleadas azulonas en Copa pasando por victorias holgadas en el Coliseum de los blanquiazules. Ha pasado de todo y no sólo sobre el césped. Miku y Xavi Torres han sido dos de los casos más sonados por los que ambos clubes han disputado sus intereses para hacerse con los servicios de estos jugadores, lo que granjeó en su momento varias disputas entre bambalinas.

Ahora, con todo ello en un segundo plano, el Málaga quiere seguir soñando con un presente cargado de fútbol y alegría. Pellegrini, que dio descanso para la Copa del Rey a seis de sus teóricos efectivos en el día de hoy, podrá contar con la frescura de Toulalan, Eliseu, Portillo, Isco, Joaquín y Saviola, que ni se vistieron, además de Caballero, que no fue de la partida contra el Cacereño, el pasado martes.

Así, Pellegrini se ha llevado hasta el sur de Madrid hasta 19 jugadores con la única novedad con respecto al duelo contra el Valencia de la presencia de Sergio Sánchez, ya recuperado de sus molestias. Es por ello que el técnico chileno no dudará en poner el once de gala que tantos éxitos está ofreciendo este año al equipo blanquiazul.

Por su parte, el conjunto de Luis García Plaza quiere hacer bueno el factor cancha, aunque el Coliseum sea lo más parecido a jugar en un estadio neutral. Las últimas dos visitas malaguistas al estadio azulón en Liga se cuentan por victoria, por lo que es un estadio propicio en los últimos años.

Pero el Málaga se encontrará varias adversidades. La primera es la climatología, ya que el frío suele hacer acto de presencia con intensidad en Getafe. Luego el buen hacer de los locales. Una defensa férrea y un centro del campo con llegada y calidad son sus mejores armas. Luis García tiene las bajas de Míchel, Hugo Fraile, Adrián Colunga y Rafa, que se suman a las ausencias por decisión técnica de Gavilán y Borja Fernández.