Jóvenes, aunque sobradamente preparados. Isco Alarcón y Mario Gotze representan el fútbol moderno, el arte balompédico que está por venir. Ambos ya son malabaristas del balón, pero están llamados a ser las futuras estrellas del Viejo Continente, los líderes de una nueva generación de futbolistas que comienza a esbozar sus mejores obras sobre los verdes pastos de Europa.

Esta semana vuelve a escena la Liga de Campeones y con ella uno de los duelos más atractivos del panorama europeo. Málaga y Borussia Dortmund encarnan el fútbol moderno, la frescura de las caras nuevas que se cuelan en la fiesta de los grandes. Y lo hacen en los cuartos de final de la Liga de Campeones, sobre el mejor escenario posible.

La cita cuenta con un importante elenco de actores, pero destacan los dos jugones jóvenes del momento en Europa. Dos estrellas condenadas a triunfar y a hacer importante carrera en el mundo del fútbol.

El malagueño de a pie ya conoce de sobra a Isco Alarcón, el líder del Málaga CF. El actual Golden Boy lleva un año y medio de ascensión meteórica. Goles, jugadas imposibles, liderazgo, la selección y ahora brillando por Europa. Ese mismo camino lo recorrió solo un año antes Mario Gotze, el anterior Golden Boy que milita en las filas del Borussia Dortmund y que ya acumula elogios y premios en su vitrina.

Mario Gotze también fue galardonado el pasado curso como el mejor jugador joven de Europa. Y no es para menos. Alemán, nacido en la localidad de Memmingen, situada al sur del país, irrumpe entre los mejores del planeta. Su fútbol, de puro vértigo, ha cautivado a media Europa y los grandes del continente ya le han echado el ojo.

Al igual que Isco, el «Gigante Amarillo», «Messi alemán», «Gotzinho» o «Súper Mario», como lo conocen en Alemania, suma 20 primaveras, aunque no le impide ser uno de los líderes del Borussia Dortmund que ganó las dos últimas Bundesligas y que se ha colado entre los ocho mejores de Europa.

Gotze (3 de junio de 1992) nació en un hogar de universitarios, pero regateó a los estudios para convertirse desde ya en una de las estrellas de la Mannschaft, donde ya ha jugado 22 encuentros y marcado 5 goles. Debutó con el primer equipo del Dortmund en noviembre de 2009 ante el Mainz, con apenas 17 años y cinco meses. Y desde entonces, suma y sigue.

Mediapunta eléctrico y de gran velocidad, cuenta con una gran capacidad para la improvisación a medida que encara a los rivales. Tiene llegada y mucho gol y será la estrella germana en la próxima década. Gotze, protegido por Jurgen Klopp -su actual técnico- y su club como si fuera un diamante en bruto -no concedía entrevistas y siempre han dosificado sus apariciones públicas- es un admirador de Guardiola, como apunta en su perfil de facebook. «No jugaba exactamente en mi posición, por lo que no es mi icono como futbolista. Pero sí como técnico. La filosofía que le imprime a su equipo tiene mucho que ver con sus 12 títulos en tres años». Además, recientemente también aseguró que le gustaría ser el Cristiano Ronaldo alemán, cuestionado por su parecido con Messi.

El 27 de Marzo de 2012, el «10» renovó con el Dortmund hasta 2016. Su salario pasó de 2.5 millones de euros a 4 millones de euros por temporada.

En comparativa con Isco, en lo meramente futbolístico, son dos conceptos muy diferentes, pero igualmente de estéticos y destacables. El malagueño es más pausado e imprevisible en estático, más asociativo. Gotze, que forma una pareja letal con Reus, destaca por su rapidez con el balón y por su verticalidad. Dos estilos de juego divergentes y dos formas de entender el fútbol. Ambos serán el yin y el yang del fútbol del futuro, pero de momento son los príncipes del Málaga y del Borussia Dortmund. Eso sí, solo puede seguir uno en pie.

@JoseCriadoOpi