Cuando apenas quedaban diez minutos para la conclusión del choque, la afición malaguista se arrancaba con el himno del equipo, iniciando un tramo final de partido de homenaje, reconocimiento a un conjunto que corrió como nunca para dar la cara ante un Borussia de Dortmund que huele a peligro con sólo nombrarlo. No fue mejor, porque no lo fue, pero el Málaga esta noche puso todo lo que tiene para demostrar por qué está entre los ocho mejores de Europa, y consiguió un resultado que deja todo por decidir en el Signal Iduna Park, la semana que viene, en la vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones.

Campeón es el Dortmund, y lo demuestra sobre el campo, haciendo buenos los comentarios que, ya desde la fase de grupos, lo daban como un candidato al cetro europeo. Fueron mejores a los puntos, sobre todo en la primera parte, y de no ser por Caballero, pudieron reescribir la historia del encuentro antes del descanso. Dos acciones ante Gotze (un mano a mano providencial), y sendos despejes a disparos de Reus mantuvieron vivo al Málaga, que también tuvo sus opciones. Un pase en profundidad de Isco al que no llegó Saviola, un remate de Weligton (que no estará en Dortmund) que fallaba lo increíble y otro de Baptista despejado por una gran mano de Weidenfeller, equilibraron el saldo de ocasiones en los primeros 45 minutos, no así la sensación de que los de Jurgen Klopp pudieron tener más premio.

Si increíble fue la ocasión del capitán del Málaga, igualmente lo fue la de Robert Lewandowski. El delantero polaco, descomunal en su juego de espaldas y combinativo, pifió su remate nada más reanudarse el encuentro tras el descanso, pero sin emborronar el partido que se marcó en La Rosaleda, forzando incluso la amarilla para el chileno Iturra, que tampoco podrá ser de la partida la semana que viene en Dortmund.

Comenzaron los cambios y se fue atemperando un partido con mayúsculas, pero sin el broche del gol por parte de ninguno de los dos conjuntos. Un disparo cruzado de Gotze, que ayer dio más la cara para los suyos que un difuminado Isco, por bando alemán, y un chutazo del 22 malaguista, seguido de otro de Toulalan, fueron las más claras oportunidades de un gol que nunca llegó y que deja, así, la puerta de las semifinales encajada para que el Málaga siga haciendo historia en Europa. Ojalá.

Ficha:

MÁLAGA: Willy Caballero; Jesús Gámez, Demichelis, Weligton, Antunes; Toulalan, Iturra, Isco (Duda, min.86), Joaquín; Baptista (Santa Cruz, min.76) y Saviola (Portillo, min.67).

BORUSSIA DORTMUND: Weidenfeller; Piszczek, Subotic, Felipe Santana, Schmelzer; Kehl (Bender, min.79), Gündogan, Götze (Kirch, min.92), Reus (Schieber, min.69), Grosskreutz y Lewandowski.

ÁRBITRO: Jonas Eriksson (SUE). Amonestó con tarjeta amarilla a Antunes (min.19), Weligton (min.31) e Iturra (min.77) por parte del Málaga; y a Grosskreutz (min.17) por parte del Borussia Dormund.