Isco ya ha tomado una decisión sobre su futuro y no es otra que estar en el próximo Mundial de Brasil el verano de 2014. No es su futuro más inmediato, ya que para ello debe transcurrir todo el curso próximo, pero el malagueño, tras ganar el Europeo con la sub´21, se ha fijado como meta acudir a la cita internacional dentro de un año por estas mismas fechas. Es decir, que para estar en la lista definitiva de Vicente del Bosque, Isco deberá completar otro buen año sobre el verde, por lo que todo está sumamente relacionado.

La competencia en la «Roja» es altísima. Casi todos los jugadores que acuden con el combinado nacional son titulares y estrellas de sus equipos. Y desembarcar a uno solo de los 23 es ya todo un éxito. Pero Isco quiere colarse en la cita mundialista. Y para ello necesita jugar muchos minutos y ser protagonista el próximo curso, esté en el club que esté. De ahí que su elección se demore en el tiempo.

El malagueño ya lo ha dicho en numerosas ocasiones: «quiero jugar y que el Málaga también salga beneficiado». El deseo expreso del malagueño para firmar por el Manchester City, el Real Madrid o cualquier otro club interesado es jugar. Gozar de minutos para seguir creciendo y para convencer a Del Bosque que su fútbol ya requiere el salto mundialista.

El seleccionador español ya le dijo a Isco, en la última concentración, que si mantenía su nivel tendría un hueco para ir a Brasil. Y el malagueño persigue ese sueño con ganas. La Copa del Mundo no está tan lejos para el de Benalmádena.

Negociaciones

Bajo esa premisa, la decisión de Isco será decisiva. De los dos clubes que más fuerte pujan por sus servicios, el Manchester City tiene ganada la delantera. Pero la insistencia del Real Madrid también está cautivando al malagueño.

Isco necesita un gran escaparate para mostrar su fútbol y competir al máximo nivel con título en el final de la meta. Así, su continuidad en el nuevo Málaga que no disputará competición europea está casi descartada, además que el club necesita vender al joven malaguista.

Ayer hubo una nueva toma de contacto entre el Real Madrid y el Málaga CF en la capital de España. A la cita acudió Vicente Casado, que escuchó de boca de los dirigentes madridistas la nueva propuesta blanca. Más elevada que la que se llevó a cabo el pasado curso, pero aún lejos de las pretensiones malaguistas, que no son otras que los 35 millones de euros de la cláusula de rescisión del malaguista.

El Real Madrid pretende abaratar el fichaje con jugadores en la operación. El Málaga pidió en un primer momento a Morata, pero Jesé o Callejón son las alternativas que presenta la entidad blanca. Sus altas fichas son el hándicap a tener en cuenta. En los próximos días se seguirán manteniendo reuniones para acercar posturas.

Con todo, el interés blanco parece seguir aún por detrás del interés del Manchester City. La elección de Isco está enfocada a jugar y el malagueño entiende que en las filas blancas puede encontrar más piedras en el camino hacia la titularidad que en Manchester, donde Manuel Pellegrini avala su fichaje y le guía bajo su regazo.

El City, por su parte, aún no ha mostrado oferta formal por el malagueño, aunque los contactos con el jugador sí se han producido. Según apuntaba la prensa británica, el primer ofrecimiento formal de los citizen podría llegar en las próximas horas y la cantidad de los celestes rondaría los 25 millones de euros, aún lejos de los 35 «kilos» que quiere el Málaga.

Desde el club apuntan que no hay programada ninguna reunión con emisarios del Manchester City estos días, pero la ofensiva inglesa estaría al caer.

Mientras todas las reuniones y los rumores se suceden, Isco vive ajeno estos días en Ibiza sus vacaciones. El malagueño, que se ha ganado sobre el césped un buen descanso, ha delegado en su padre y su abogado su futuro con una premisa clara: elegir un club en el que pueda jugar y disfrutar.