Posiblemente Bobley Anderson y Bartlomiej Pawlowski sean los jugadores que más complicaciones están encontrando para adaptarse a su nueva aventura en el Málaga CF. Primero por su juventud y después por el idioma, ambas estrellas prematuras intentar acelerar sus pasos día a día.
Sin embargo, si Pawlowski sonríe tras la resolución de su caso y tras estrenarse como goleador en la Liga BBVA con un golazo ante el Valladolid, la tristeza se instala en Anderson una jornada más.
El marfileño por fin pudo estrenarse como titular ante el Almería hace dos jornadas, pero en su debut se le vio nervioso e impreciso. Atesora calidad, pero necesita acoplarse a su nuevo rol. Pero a todo ello hay que unirle el infortunio de las lesiones. Y es que ayer volvió a fastidiarse el centrocampista ofensivo del Málaga CF. No se ejercitó con el resto del grupo y fue sometido a unas pruebas médicas que le detectaron un esguince de grado I-II en el ligamento lateral externo de su rodilla derecha, que casi con toda seguridad le impedirán jugar este viernes contra Osasuna en la octava jornada de Liga.
No es la primera lesión que sufre Anderson, ya que semanas atrás también sufrió molestias musculares que le dejaron fuera de la convocatoria. El centrocampista africano, llamado a ser uno de los baluartes del Málaga en el futuro, poco a poco debe ir encontrando su sitio para comenzar a mostrar su nivel y la inversión que el Málaga realizó el pasado verano por él, llegando a pagar un millón de euros.
