Y a la décima jornada, Schuster se quitará el cinturón de seguridad y saldrá con todo ante el Celta de Vigo. Si en la previa se apuntaba que el técnico alemán ya barruntaba la opción de poner de inicio a la pareja Santa Cruz y El Hamdaoui por vez primera, ayer el míster lo confirmó en sala de prensa en lo que es toda una declaración de intenciones.

El entrenador del Málaga no quiere rehenes contra el Celta y saldrá a por el partido desde el primer minuto, sin contemplaciones y sin vacilaciones. Desde luego, la ocasión requiere medidas drásticas y poner de inicio a sus dos mejores atacantes es un paso al frente para revertir la delicada situación en la que se ha metido el Málaga tras sus últimos traspiés.

Dos derrotas consecutivas, dos partidos sin ver portería, tres encuentros sin ganar, rotaciones, bajón en el juego, despistes defensivos... Un cúmulo de circunstancias que Schuster pretende acabar con ellas de una vez por todas esta tarde ante el Celta de Vigo.

Se podría pensar que el rival es propicio, ya que llega como penúltimo clasificado con una rémora de cuatro partidos seguidos perdiendo, sólo un gol marcado en los últimos cinco y una victoria en lo que va de Liga. Pero las confianzas no son buenos compañeros de viaje y por ello la plantilla blanquiazul ha hecho propósito de enmienda para poner el cien por cien de concentración en un partido mucho más importante de lo que se piensa.

La principal novedad, como se apunta con anterioridad, será ver de inicio a Roque y Mounir. El Málaga intentará ser más ofensivo que en otras ocasiones. Por supuesto deberá mostrar más su faceta atacante que el día del Bernabéu. Y se espera que tras nueve jornadas de acoplamiento, el experimento de colocar al paraguayo y al marroquí de inicio sea exitoso.

La afición reclamaba desde hace jornadas esta apuesta y Schuster ha decidido no esperar más. Así, la movilidad de El Hamdaoui y la presencia ofensiva de Santa Cruz serán el mejor argumento para intentar conseguir el triunfo sobre el Celta. Una victoria que se antoja necesaria para alejarse de la zona baja de la clasificación y para evitar problemas mayores. Las luces de alarma no se han encendido aún en Martiricos, pero de no lograr hoy el triunfo, la situación comenzará a ser sumamente delicada.

Para la cita, Schuster no puede contar con Sergio Sánchez sancionado ni con los lesionados Flavio y Angeleri. Roberto Chen será el gran beneficiado, ya que volverá a ser de la partida por segunda vez en el centro de la zaga, esta vez acompañando a Weligton. El alemán también ha recuperado para la causa a Pawlowski, tras quedarse el polaco fuera de la lista la semana pasada. Pero ha dejado en la grada a Fabrice y Juanmi, que siguen sin convencer al entrenador.

El rival

Por su parte el Celta también llega con la imperiosa necesidad de ganar. Esta misma semana ha sido ratificado en su cargo por el presidente del Celta el entrenador Luis Enrique, lo que suele ser la antesala de la destitución. De no lograr la victoria en Málaga, el conjunto gallego seguiría en puestos comprometidos con solo un triunfo en diez jornadas.

El entrenador asturiano recupera a Augusto, pero cuenta con las bajas de Krohn-Dehli, Samuel Llorca, Mario Bermejo y Carlos Bellvís, además del centrocampista hispano-brasileño Rafinha, quien deberá cumplir un partido de sanción por acumulación de tarjetas. Será un partido de tensión y con mucha artillería.