­Por si quedaba algún tipo de dudas, Vicente Casado las despejó todas el viernes en la Junta General de Accionistas: La Ciudad Deportiva del Málaga no se construirá en la zona de Arraijanal pese a contar con todos los permisos de las autoridades, al menos de momento. La decisión de dejar de invertir del jeque Al-Thani, propietario y presidente del club y la consiguiente falta de capital, han terminado por dar al traste con el proyecto, que seguirá aparcado hasta nuevo aviso.

Por ello, el Málaga CF ya trabaja en otras vías para llevar a cabo su tan ansiada Academia, uno de los proyectos básicos en los planes del propietario catarí desde que compró la entidad de Martiricos. Pero lo cierto es que sin su implicación económica se hace inviable que el Málaga, por sí solo, pueda hacer frente a un proyecto tan ambicioso como el que tenía planeado para Arraijanal.

Así las cosas, el club se plantea un proyecto paralelo «low cost» que pasaría por reformar los campos que el Málaga tiene en la zona de El Viso, una opción más barata que costaría a la entidad en torno a 1,5 millones de euros, como publicó ayer Sur.

El Málaga cuenta aún con cuatro campos en esa parcela, uno de fútbol 11, y otros tres de tierra, pero el problema radica en que estos terrenos forman parte del plan de ampliación de la Universidad de Málaga, por lo que los dirigentes tendrían que sentarse para negociar con las autoridades. Dicho proyecto está aún en estudio y el club tendría previsto instalar allí dos campos de dimensiones grandes, uno de césped natural y otros dos de fútbol siete, dado el tamaño de la parcela y cuya superficie sería de hierba sintética.

Es una de las posibilidades que maneja el Málaga, aunque también cuenta con la opción de «emigrar» a un municipio cercano a la capital que ya han ofrecido terrenos, una opción que el club, a día de hoy, no se encuentra entres sus prioridades.