La segunda vuelta del Málaga CF en la Liga BBVA tiene dos caras bien diferenciadas. La que muestra en La Rosaleda, firme y eficaz; y la que saca a relucir lejos de Martiricos, irregular y ramplona en la mayoría de sus salidas. Esa faceta a domicilio es la que ha dilapidado la renta de 8 puntos que el Málaga (séptimo) manejaba con el octavo clasificado desde la jornada 24, cuando venció por última vez fuera de casa, en el Camp Nou al Barcelona contra todo pronóstico.

Desde entonces y tras la machada en Can Barça, el Málaga no sabe lo que es puntuar lejos del cobijo que le da su afición. Dos meses en los que cada salida del Málaga ha supuesto una derrota -Granada (1-0), Rayo Vallecano (1-0), Eibar (1-0) y Real Madrid (3-1)Real Madrid. Un lastre que están aprovechando sus principales perseguidores en plena pelea por Europa, ya que en ocho jornadas el colchón del que disfrutaba el equipo de Gracia se ha visto reducido de manera alarmante.

Nadie dijo que atar la séptima plaza iba a ser fácil. Una posición que presumiblemente servirá para jugar la Liga Europa la próxima temporada, siempre que el FC Barcelona cumpla con los pronósticos y se imponga en la final de la Copa del Rey contra el Athletic Club. Pero la renta que manejaba el conjunto malaguista está menguando de manera alarmante.

Así las cosas, con sus principales perseguidores por la séptima posición, el Málaga ha visto reducido su distancia de 11 puntos a 3 con el Athletic; y de 9 a 4 con el Espanyol y el Celta. Una involución preocupante que el Málaga debe cortar si quiere jugar Europa el próximo curso.

Es cierto que la regularidad del conjunto que adiestra Javi Gracia durante la primera vuelta era difícil de mantener. Consiguió los mejores números de su historia en la primera vuelta e igualó el récord de victorias consecutivas (5) en Primera División, que tenía el Málaga de Manuel Pellegrini.

Además, también es cierto que los equipos afinan al final del curso y tanto Athletic, Espanyol y Celta mantienen ahora una mejor racha de resultados que el equipo blanquiazul.