Se apagan las luces del gimnasio y del Estadio de Atletismo que tan duras sesiones han acogido este verano y comienzan a encenderse las de La Rosaleda. La cuenta atrás para el inicio de la temporada ya ha comenzado y La Opinión de Málaga ha querido testar cómo lo afronta el técnico del Málaga CF en su segunda campaña al frente del equipo blanquiazul. En una amplia entrevista, el navarro aborda temas calientes como la venta de los jóvenes valores malaguistas, el caso Darder, su relación con Ochoa tras un verano con algunas declaraciones cruzadas o lo que espera del mercado. Todo con la naturalidad que le caracteriza y con la que espera seguir llevando al Málaga por la buena senda.

Arranca el nuevo curso, su segundo al frente del Málaga CF. ¿Qué espera de esta nueva temporada que comienza en unos días?

Esperamos que sea una temporada que responda a toda la ilusión de nuestra afición, a las expectativas que tienen en el club y a las que los profesionales también nos marcamos. Esperamos que sea un año de poco sufrimiento. Y no sólo quedarnos en eso, también ojalá a lo largo de la temporada podamos mirar, como el año pasado, un poquito más hacia arriba que hacia abajo. Pero más allá de marcar un objetivo claro tenemos que ir viendo las posibilidades del equipo y viendo cómo se desarrolla la temporada.

Parecerá inevitable comparar esta nueva campaña con el inicio del curso pasado. ¿Le parece justo tener esa presión añadida?

Me gusta valorar las cosas que se hicieron bien, porque son referencia sobre todo para un grupo de jugadores que aún continúa. Además nos tiene que servir para la nueva temporada. Pero sí es verdad que no nos interesa demasiado hablar del pasado. Creo que no es bueno para nosotros estar constantemente mirando hacia atrás. Con un grupo de jugadores nuevo que tiene también muchas virtudes debemos mirar hacia adelante para construir un futuro juntos. El pasado ya pasó y tenemos que mirar hacia adelante.

¿Le preocupa el duro arranque de la Liga BBVA contra el Sevilla y contra el Barcelona?

Son dos grandes equipos, lo están demostrando y están luchando por los primeros títulos de la temporada. Hicieron muy buen trabajo el año pasado y han fortalecido sus plantillas para la Champions. Son dos equipos fuertes, están rodados y han competido en otras competiciones ya. Sabemos que no va a ser sencillo, pero yo no quiero entrar a valorar cuando me enfrento a un equipo si está mejor o peor. Es nuestro rival, tenemos nuestras opciones y sobre todo en nuestro primer partido en nuestra casa con nuestra afición, creo que somos capaces de ganar a cualquiera.

Curiosamente, el Málaga fue el curso pasado el único equipo que consiguió parar al Barcelona -ganador de todos los títulos- en dos ocasiones. ¿Esa pócima la sigue llevando consigo?

Bueno, son muchas las circunstancias que se tienen que dar para ganar en el Camp Nou y empatar sin goles en Málaga. La más importante, que es la que nos debe preocupar a nosotros, es qué hicimos o qué trabajo llevamos a cabo para parar al Barcelona. Lo demás, muchas veces no depende de uno. Seguimos con esa ilusión, intensidad y ritmo de trabajo porque creemos que con eso nos puede dar alguna opción de ganar a estos equipos. No sé cuantas, pero alguna seguro que nos da.

¿Cómo llega el equipo a este inicio de temporada? Algunas voces no han terminado de ver estas dos semanas sin fútbol...

Para hacer una valoración de este final de pretemporada es mejor hacer una valoración conjunta. Fuimos el primer equipo que empezamos el trabajo de los que sólo juegan Liga. Somos los que más trabajo tenemos acumulado. Llevamos un par de giras por medio, que nos ha obligado a muy poco descanso. En estos momentos es más aconsejable para esta plantilla que tiene jugadores nuevos el hecho de entrenar juntos que jugar un partido o dos.

Y en cuanto a los resultados cosechados y las giras que ha tenido, ¿qué balance hace de la pretemporada?

Más que los resultados, que pueden ser consecuencias de si las cosas se han hecho bien o no, yo me fijaría más en el análisis, crecimiento y mejora del equipo. Y creo que eso lo hemos hecho. Hemos podido fijarnos en los partidos y analizarlos para ver qué hemos hecho bien y mal. Eso nos ha servido para mejorar y para conocernos, porque había nuevas incorporaciones. Pero el balance es positivo de todo, incluso de lo más incómodo, que ha podido ser tantos desplazamientos y tantos aviones o cambios de estaciones y temperaturas. Todas esas cosas unen al grupo y esas experiencias nos preparan para la competición, que no va a ser solo jugar.

¿Llega el equipo en el punto físico y mental que Javi Gracia querría o aún le falta un poco?

Creo que estamos bien. Creo que llegamos en buen momento y fruto de ese tiempo que hemos tenido para preparar el equipo desde primeros de julio, estamos preparados.

El equipo ha sufrido muchas novedades este curso, sobre todo en la parcela de ataque. ¿Eso puede cambiar también la forma de jugar del equipo? Se habla también mucho de que puede optar a jugar de inicio con dos delanteros...

Sí, es cierto, tenemos la obligación de cambiar porque por mucho que al entrenador le guste jugar de una manera determinada, todo pasa a un segundo plano porque lo prioritario es sacarle rendimiento a los jugadores que tienes. Y en este caso, en la plantilla hay que volver a buscar ese equilibrio para ser competitivos. Y es cierto que tenemos jugadores diferentes y se pueden emplear opciones diferentes, y una de ellas efectivamente es poder jugar con dos delanteros de inicio. O jugar con algunos jugadores en banda que no son tan específicos de banda, porque carecemos un poco de eso en la plantilla. Y por lo demás, creo que lo que son conceptos de juego pueden ser muy similares a lo que venimos jugando al año anterior.

Lo que sí parece es que este año hay más gol en el equipo. O al menos más facilidad goleadora...

Bueno, ya lo veremos. De momento son partidos de pretemporada. Hay que verlo durante la temporada si tenemos esa eficacia y si esas ocasiones que se generan se materializan. Yo considero que hay jugadores en la plantilla que por lo menos en otros equipos han mantenido una eficacia goleadora alta. Eso invita a pensar que también aquí lo pueden hacer, más allá de que en pretemporada puedan hacerlo. Vamos a ver si podemos llegar a hacer una buena cifra de goles, pese a que el primer objetivo del equipo es intentar ser un conjunto que no encaje gol.

¿Qué le parece cómo se han adaptado los nuevos?

Pues muy bien. A día de hoy la verdad es que ya no me parece que sea nuevo nadie después de todo lo que hemos convivido. Hemos tenido muchas experiencias. Por su parte, una gran actitud para integrarse rápido. Y siendo buenos jugadores, todo eso lo facilita. Y también la buena acogida que han tenido los que ya estaban. Creo que es un grupo humanamente muy bueno y que ojalá recoja profesionalmente lo que se merece.

Charles, uno de los jugadores que se presupone que va a ser importante en la plantilla, siempre que ha hablado públicamente ha destacado la buena sintonía que los unen profesionalmente...

Es de los pocos jugadores que es cierto que cuando he cambiado de club, he intentado llevarlo. Sí es cierto que en los equipos en los que hemos coincidido siempre ha sido garantía de gol. No es que tengamos una gran relación personal, porque fuera del trabajo no coincidimos nunca, pero sí es de los jugadores que a mí me ilusiona tener en mis equipos porque sé de lo que es capaz.

Otro de los puestos con interrogantes vuelve a estar en la portería. Recientemente Kameni ha comentado en una entrevista que él se considera titular, pero que usted tendrá la última palabra. ¿Hay debate bajo los palos o va a haber una línea continuista?

A mí me gusta que los jugadores peleen y se sientan que son importantes. A mí la palabra titular no me gusta, pero sí que se sientan importantes y que quieren jugar. Eso hace que el equipo funcione y que la competencia ofrezca su nivel. En cuanto a la portería, no veo diferencias con respecto a otras posiciones. Hay que ver el trabajo de todos, el día a día. Eso dictaminará quién debe jugar. Y luego el entrenador decidirá, pero ellos con su trabajo son los que ponen las cosas más fáciles o complicadas al entrenador.

Al hablar de la portería, la pregunta también es inevitable. ¿Ha podido limar discrepancias con Ochoa tras el cruce de declaraciones de este verano mientras estaba con su selección?

Para mí Ochoa es uno más, nunca he tenido un problema personal con él. Me parece un chico excepcional, correcto y educado. Lo único que pasa es que querrá jugar más de lo que juega. Pero en estos momentos el entrenador decide que sea otro portero. Nada más que eso. Es fútbol y yo lo entiendo.

Ese intento de generar polémica creo que ha sido más por otras personas que por el jugador, que siempre ha tenido un comportamiento correcto.

¿El «caso Darder», es decir, las distracciones del jugador con ofertas de otros clubes y la posterior lesión le ha trastocado mucho los planes?

Bueno, ha sido un momento de distracción para todos, pero ya considero desde hace días que está con el equipo otra vez incluso sin molestias. Viendo su situación con sinceridad, hay que decir que también ha pasado por un momento en el que físicamente no ha estado bien. Perdió mucho peso, preocupado, no dormía... Eso al profesional tampoco le deja trabajar. Pero desde hace días ya es uno más y volverá a ser el Darder que todos conocen.

¿Qué le pide al nuevo curso?

Pues tener primero pocas lesiones, que creo que van a hacer de este grupo un buen nivel. Y a partir de ahí me gustaría volver a generar otra vez entre el equipo y afición esa unión que el año pasado nos ayudó desde el primer partido a ganar tres puntos. Que quizás ya nadie se acuerda, pero esa victoria sobre el Athletic nos ayudó a luchar casi hasta el final por esas posiciones europeas. Por eso me parece muy importante, por nuestra parte primero, dar una imagen a nuestra afición de confianza y credibilidad. Algo con lo que la afición se identifique con el equipo. Y luego que disfruten y que también nos ayuden en partidos complicados que vamos a tener desde el primer día.