Suenan cada vez más cerca los tambores de una batalla grande y los malaguistas ya se engalanan con sus mejores vestimentas. Hay muchas ganas de fútbol en la ciudad, en la afición, en los jugadores y en el seno del propio club. Se ansía que el balón eche a rodar cuanto antes para calibrar el nivel del nuevo proyecto de Javi Gracia y también para volver a disfrutar en La Rosaleda. Se mira con optimismo a los nuevos y se ensalza a los que continúan. Y sobre todo se sueña con empezar ganando.

El malaguismo se prepara para repetir el ritual que supone acudir a La Rosaleda. Volver a ver las caras conocidas, oler el verde de Martiricos o emocionarse con cada jugada. Sensaciones que han estado aparcadas estos tres últimos meses y que este viernes volverán a brotar.

Pero no serán las únicas ya que a ellas hay que unir la visita del Sevilla, lo que supone un derbi que convierte el partido en más especial, si cabe. Para ello se espera un gran ambientazo donde incluso se puede rozar el lleno.

El partido será declarado de alto riesgo por la rivalidad deportiva de ambas aficiones, aunque los incidentes ya forman parte del pasado. Sin embargo, en esa coctelera habrá que añadir también que será uno de los días fuertes de la Feria malagueña, que vivirá sus últimos coletazos.

Por todo ello, la policía incrementará las medidas de seguridad para intentar evitar cualquier incidente.

Aún así, se espera un ambiente de gala dentro del estadio donde habrá caras nuevas, equipaciones también de estreno y alguna que otra novedad... El Málaga está cerca de cerrar las casi 30.000 localidades con las que cuenta para crear una atmósfera de plena competición, de partido grande.

Ayer, al cierre de esta edición, aún restaban poco más de 4.000 entradas a la venta. En concreto un total de 4.488. Desde las oficinas de Martiricos esperan que se alcance el lleno -o al menos que se quede bastante cerca- para abrazar el estreno de la Liga y para medirse al Sevilla en uno de los partidos más esperados por el malaguismo cada año.

Pero si expectación hay en Málaga para el inicio de Liga, en Sevilla también la hay por acudir a La Rosaleda este viernes. Con un precio de 30 euros, las 800 localidades que el Málaga CF facilitó al conjunto hispalense se vendieron ayer en las taquillas del Sánchez Pizjuán en menos de dos horas. El Sevilla ha solicitado al Málaga CF más localidades para atender parte de la demanda que tiene, pero ahora es la policía la que debe dar el visto bueno, ya que el partido será de alto riesgo.