El Málaga CF tiene la pólvora mojada. Todo lo que entraba en pretemporada ahora no lo hace. Son ya tres partidos sin ver puerta, los tres que se llevan disputados del campeonato. Aunque muy lejos de encender las alarmas, la plantilla hace causa común y asegura al unísono que los goles llegarán más pronto que tarde. El último en afirmar tal cosa ha sido Carlos Kameni, uno de los veteranos del equipo y voz más que autorizada dentro del vestuario blanquiazul.

«El Málaga tiene mucha calidad en ataque y os puedo asegurar que los porteros sufrimos con los delanteros en los entrenamientos, nos meten muchos goles. Yo los veo bien, no hay ningún síntoma de alarma o preocupación. Sabemos que los goles acabarán llegando», dijo Kameni ayer en rueda de prensa tras la sesión preparatoria de cara al partido con el Getafe el viernes.

«Es normal que cuando los delanteros no marcan se agobien un poco, ellos viven de los goles y es normal eso», explicó.

Lo cierto es que el Málaga ofreció una buena imagen en los dos primeros partidos contra el Sevilla y Barcelona, donde mereció mejor suerte y generó ocasiones de gol suficientes para haber inaugurado su casillero de goles. Pero ante el Eibar el equipo dio un paso atrás, lo que preocupa a todo el malaguismo. «No estamos preocupados, estamos trabajando muy bien. Hemos hecho una buena pretemporada y hemos tenido un inicio difícil con respecto a los rivales. El equipo ha respondido bien en lo defensivo, estamos entre los menos goleados», argumentó el africano.

En ese sentido, ensalzó la labor colectiva del equipo a la hora de defender, «desde los delanteros hasta la defensa». «La defensa del Málaga empieza arriba, no sólo con los centrocampistas y defensas, todo empieza desde arriba. Los atacantes hacen un trabajo delicado e importante. Pero a nivel ofensivo es lo mismo, hablamos de un bloque, aquí defendemos y atacamos juntos».

Y se quitó méritos pese a estar a día de hoy entre los porteros menos goleados de Primera con un solo gol encajado. «No voy a ser egoísta, el fútbol es un deporte colectivo y siempre pienso en el bien de mi equipo. No estoy aquí para ganar el Zamora, sino para acabar con el Málaga lo más alto posible y disfrutar con mis compañeros y la afición», afirmó.

Kameni entiende el «enfado» de Javi Gracia tras el partido contra el Eibar, en el que el Málaga no ofreció, sin lugar a dudas, su mejor versión. «El míster casi siempre tiene palabras bonitas, pero otras veces es duro cuando tiene que serlo. Es un entrenador que sabe llevar al grupo. No me voy a meter en la forma de trabajar porque lo estamos haciendo bien. Tampoco hay que alarmarse en el plano anímico. Puede parecer que perdimos dos puntos porque jugamos en casa, pero mira si en la última jugada nos hubieran marcado€ Al final un punto ya es algo y estamos preparados para el partido del viernes. Ojalá lleguemos con las pilas bien cargadas y sumemos tres».

Así, indicó que ante el Getafe lo único que les vale es salir a ganar pese a que el equipo madrileño también necesita sumar. «Necesitamos los tres puntos y ellos también. Hay que salir con esa mentalidad. ¿Qué se nos da mal ese campo? Para mí no existe en el fútbol un campo que se te dé bien o mal, depende de cómo llegues el día de partido y hagas las cosas».

Por otro lado, Kameni también abordó el asunto de los pitos del domingo oídos en La Rosaleda. «La directiva no juega, si hubo pitos será dirigidos a los jugadores, que somos nosotros. Los entendemos. Cuando ganamos está con nosotros, y nos apoyan cuando estamos en apuros. Si llega un momento que alguno ve oportuno pitar para decir que nos ven dormidos, es una forma de expresarse, trabajamos fuerte y bien para poder dar una alegría a los nuestros».

Por último, el camerunés aclaró la confusión producida el domingo con el brazalete de capitán, que él lució en la primera parte y Recio en la segunda. «Lo tenía que llevar Recio, nos dimos cuenta en el descanso y con normalidad se lo pasé a él. Recio comenzó la segunda parte pero como en el acta estaba registrado que lo tenía que llevar yo al final terminé el partido con el brazalete», concluyó.