­ Luis Alberto amenaza a La Rosaleda. Sí, el mediapunta gaditano que la pasada temporada militó en el conjunto blanquiazul sin demasiada fortuna y que ahora parece haber encontrado la felicidad en el Deportivo de La Coruña. El centrocampista del próximo rival malaguista no salió contento de Martiricos este verano -el club tenía una opción de ampliar su cesión un año más pero declinó esa posibilidad-, y ayer pasó por sala de prensa del Deportivo en la que recordó su paso por Málaga. «La afición me trató bien y espero un recibimiento normal, como el de cualquier otro jugador. Para mí, va a ser un poco especial porque el año pasado lo pasé mal y espero que me salga un partido redondo», admitió el gaditano, que estuvo cedido por el Liverpool.

Luis Alberto aseguró que «estaba esperando este partido» e insistió en que es «más especial de lo normal» para él porque la temporada pasada comenzó jugando y apenas tuvo protagonismo en la segunda vuelta del campeonato.

Hay que recordar que él fue el que abrió la temporada goleadora con su tanto sobre el Athletic Club. Y volvió a «mojar» en un bello gol contra el Elche. Su protagonismo, cierto es, se fue diluyendo ya que comenzó siendo titular y acabó en el ostracismo. No convenció a Javi Gracia y de ahí que no se ampliara su continuidad una temporada más. Ahora, en el Dépor de Víctor Sánchez del Amo, vuelve a sonreír. En ocho jornadas de Liga ha sido titular en seis y ha marcado ya dos tantos. Se ha vuelto un jugador imprescindible para los gallegos, que de momento son sextos con 13 puntos. Será Luis Alberto una amenaza para el Málaga y su reacción.

Los mediapuntas, bajo lupa. Sin embargo, el caso de Luis Alberto tiene varias similitudes con jugadores de parecido perfil en el Málaga CF. En los esquemas de Javi Gracia no tienen demasiada cabida los mediapuntas y así se ha venido demostrando desde que el técnico aterrizó en Martiricos. Su forma de jugar, la exigencia física y táctica en dicha posición o meros gustos futbolísticos podrían ser algunos de los argumentos para prescindir de este tipo de jugador.

Luis Alberto pasó de la titularidad a la grada con el paso de las jornadas, pero ya el curso pasado Portillo -por razones también extradeportivas- sólo jugó dos partidos en Copa antes de irse al Betis. Y Pablo Pérez no llegó a jugar ningún minuto antes de marcharse al Boca Juniors.

Este curso, Fabio Espinho aún no ha debutado, mientras que Juanpi alterna minutos con el banquillo. Duda, que ha sumado 32 partidos en la era Gracia -aunque no todos de mediapunta- sí parece ser una opción fiable.