El «¡Al-Thani, vete ya!» del sábado pasado en La Rosaleda no parece ser una moda pasajera. El malaguismo, varios días después de la derrota ante el Real Betis, sigue hastiado y durante estos días la tensión no parece haberse rebajado en torno al dirigente blanquiazul. En una encuesta realizada en la web de La Opinión de Málaga, los internautas señalan al presidente del Málaga CF como el principal culpable de la actual crisis deportiva del equipo. Un mérito que parece haber ganado por su dejadez y su inacción como responsable del club.

Con un 61 por ciento de los votos, la afición señala a Abdullah Al-Thani como el culpable. La falta de inversión, la negativa a vender, o los místicos mensajes que deslizaba a través de las redes sociales han jugado en contra del dirigente, que pese a que no aparece por Málaga desde hace mucho tiempo, sí se lleva el peso de las culpas.

Muy por detrás en la encuesta está la actual directiva, de la que también se oyeron voces discordantes el pasado sábado en el duelo contra los verdiblancos, pero en menor medida que hacia el dirigente. Un 22 por ciento de internautas considera que los responsables ejecutivos que se encuentran en las oficinas del club son los culpables de la mala situación deportiva. Las planificación deportiva o las ventas del pasado verano han pesado demasiado.

El cuerpo técnico, encabezado por Javi Gracia, aglutina un 14 por ciento de los votos en un tercer escalón. Son varias, aunque no muy numerosas, las voces que reclaman al navarro más variantes en sus esquemas y que lo acusan de ser el principal culpable de que el Málaga sume 9 puntos de 33 posibles y que tenga sólo cinco goles en su casillero.

Sorprende, sin embargo, que la mayoría de aficionados indulte a los jugadores, que al fin y al cabo son los que acaban jugando cada encuentro. Sólo un uno por ciento de los votos los señala como principales culpables.

La afición, por su parte, se exculpa de todos los males, pese a que las cifras de ocupación este año en La Rosaleda han disminuido considerablemente. De cualquier modo, la solución a esta crisis está entre todas las partes.