El Málaga CF inicia hoy su andadura en la Copa del Rey (21 horas/C+Liga) inmerso en un mar de dudas en lo institucional y en lo deportivo, lo que plantea la disyuntiva de si el torneo del KO llega como un posible bálsamo; o por el contrario, como un estorbo.

Porque no nos engañemos, el Málaga, a día de hoy, tiene sus cinco sentidos puestos en la Liga, donde el domingo se juega la vida en San Mamés ante el Athletic. Por ello, si hoy se gana en Anduva al Mirandés, el equipo utilizará la victoria como acicate y los menos habituales mandarán un mensaje al entrenador. En cambio, si se pierde, Gracia confirmará que la plantilla que maneja es deficiente y que carece de un plan b para competir, ni tan siquiera, con equipos de menor categoría.

Tales son las intenciones del entrenador de blindarse en Liga y «descartar» la Copa -aunque el mensaje de cara al exterior sea el contrario-, que ha dejado en Málaga hasta siete titulares -Kameni, Rosales, Weligton, Recio, Duda, Amrabat y Charles-, a los que da descanso pensando en el trascendental duelo del domingo.

De ahí las rotaciones que plantea el navarro, que introducirá hoy un equipo completamente nuevo y con jugadores incluso inéditos hasta la fecha. Y es que, el partido de esta noche supondrá el debut en la presente temporada del mexicano Guillermo Ochoa, a la sombra de Kameni en Liga; y de Egor Filipenko, en el que no confía lo más mínimo Javi Gracia.

También se espera la presencia de jugadores poco habituales en el once como Tighadouini o Ricardo Horta, descartes del técnico en las últimas fechas; Albentosa o Juanpi, a los que sólo ha acudido el entrenador por lesión de algún compañero.

Además, todo apunta a que Roque Santa Cruz partirá desde el inicio, una vez que ya debutó el pasado sábado frente al Granada. El paraguayo necesita minutos después de un periodo de inactividad muy largo, por lo que utilizará este duelo copero para ir cogiendo ritmo de competición.

Delante, además del frío que pueda hacer esta noche en Miranda del Ebro, el Málaga se encontrará un equipo que sorprende por su mensaje firme y confiado en el que aseguran que pueden pasar la eliminatoria frente al cuadro blanquiazul. No hay complejos en el equipo que dirige Carlos Terrazas, que considera que la diferencia entre ambos no es tanta pese a pertenecer a diferente categoría.

En la localidad burgalesa se han contagiado del optimismo del equipo y quieren volver a vivir el sueño copero que les llevó a disputar las semifinales del torneo en la temporada 2011/12, cuando militaba en Segunda B. En este sentido, y pese a que los socios pagan 15 euros para el partido, se prevé una buena entrada en Anduva, que podría rondar los 3.500 o 4.000 espectadores, cuando el recinto cuenta con una capacidad de 5.000.