Javi Gracia arrancó ayer el entrenamiento dominical, aún con la resaca del partido contra el Sevilla, con un pensamiento en la cabeza: cómo está Miguel Torres. Los acontecimientos se han sucedido en las últimas semanas para maltratar el flanco izquierdo de la zaga blanquiazul y a la prolongada lesión de Juan Carlos, que incluso pasó por el quirófano hace unos días, hay que unir la baja por sanción de Arthur Boka, que fue expulsado por doble amarilla en los últimos minutos del duelo en el Sánchez Pizjuán.
Con esos problemas afronta el Málaga CF la visita del FC Barcelona el próximo sábado a las 16.00 horas. Pero hay una pequeña puerta abierta a la esperanza. Y es que Miguel Torres presenta mejoría y en el club son optimistas para que pueda llegar al encuentro contra el conjunto culé. El madrileño, que por otra parte suele ser habitual en este tipo de envites contra rivales fuertes, lleva varias semanas en el dique seco, desde el parón invernal, por lo que se intenta ser prudentes con su regreso.
Pero ayer completó parte del entrenamiento junto con los que no jugaron contra el Sevilla, por lo que el optimismo se ha elevado. «Miguel Torres empezó la sesión integrado con normalidad en el grupo, si bien la finalizó haciendo labor específica junto al readaptador físico Hugo Camarero. El defensa madrileño está en pleno proceso de reintegración al plantel», apuntó el club en su nota del día.
La plantilla descansará hoy lunes y tiene previsto volver a trabajo mañana martes. Queda esperar que Miguel Torres sea de la partida para que Gracia no tenga que romperse la cabeza con una solución contra el Barcelona.
