Para Javi Gracia no es suficientes acaparar elogios y felicitaciones tras volver a exigir el máximo del FC Barcelona. El técnico navarro quiere más y ayer se marchó de Martiricos rumiando la derrota, de la que debería haber rescatado al menos un punto según el entrenador. «Sabemos la dificultad que tiene enfrentarse al Barcelona. No resulta fácil sumar en este tipo de partidos. Entrar tan pronto perdiendo dificulta mucho más nuestro planteamiento de espera y de estar agazapados, pero cambiamos y presionamos mucho más, subimos nuestras líneas. Competimos muy bien. Disfrutamos de ocasiones. Me voy con la sensación de haber merecido algo más. Pero los desajustes con estos equipos se pagan. Sin haber tirado ellos más, las diferencias marcan», admitió en primera instancia.

Gracia fue elogiado por su planteamiento, que vuelve a poner contra las cuerdas al Barcelona. «No quiero mirar muy atrás. Son circunstancias y momentos diferentes cada partido. Y en este caso me da rabia por el trabajo de los jugadores. Han hecho muchas cosas bien. El no sumar después de haberlo visto con opciones, es un poco triste. Pero orgulloso de cómo se ha competido. Llevamos una racha de dos derrotas pero son contra rivales potentes. Perder de esta manera, aunque no nos conformemos, es la línea a seguir».

El navarro fue cuestionado por el papel de Juanpi y su rol ahora con la salida de Amrabat. «No necesito ver a Juanpi jugar más o menos para saber sus posibilidades. Se busca más un jugador de velocidad y desequilibrio por banda».

Gracia fue cuestionado sobre si al equipo le faltó gasolina. «El esfuerzo se paga. Los jugadores acusan el esfuerzo. Pero hemos tenido ese ímpetu hasta el final. Pero ellos con ventaja en el marcador y con la calidad que tienen, es complicado. No es fácil conjugar eso, conjugar todo. Hemos tomado riesgos».

También sobre la respuesta sobre un gol tempranero. «Es algo positivo que el equipo no se ha venido abajo pero voy a ser crítico porque llevamos dos partidos con errores puntuales generados sin presión. Estoy muy satisfecho pero hay que mejorar en ese punto».

Al técnico se le preguntó sobre el ambiente. «Tenemos que intentar dar un paso más, los protagonistas somos nosotros. Ahora hay un ambiente más optimista, la gente se siente más identificada. Tenemos buenas actuaciones, pero no sumamos. Y aquí hay que sumar. E intentar que todo este ambiente de optimismo no se torne pesimista. Esta es la línea a seguir. Eso me hace estar más confiado».

Por último, fue preguntado sobre el mercado invernal. «De momento no puedo adelantar nada. Se sigue trabajando en ello, si se puede se traerá algo, pero estoy contento con lo que tengo», finalizó.

Luis Enrique halaga al Málaga

Por su parte, el técnico del Barcelona, Luis Enrique Martínez, admitió que «es difícil» que su equipo haga «una primera parte tan floja» como la que protagonizó en La Rosaleda, con «muchas imprecisiones», y afirmó que es «increíble» que empiecen «ganando» un partido y luego «cambie tanto el fútbol».

En rueda de prensa, Luis Enrique reconoció que fueron «inferiores al Málaga» en la primera parte, en la que el conjunto malagueño «ha generado muchas ocasiones» de gol, pero ello «puede ser mérito del Málaga o demérito nuestro», puntualizó.

Para el entrenador blaugrana, los motivos para que hicieran una primera parte «tan floja» pueden responder a «muchos factores», ya que «los jugadores no son máquinas», si bien resaltó que «ha sido general» en el equipo, ya que en la segunda han «estado mejor», pero aún así han «cometido mas imprecisiones».

«Nunca hacemos un partido redondo con el Málaga», señaló Luis Enrique, quien, sin embargo, dijo que se queda «con las ganas» que mostraron todos sus jugadores, debido a que las «características de los equipos grandes es ganar cuando juegas mal», pero «para ganar aquí hay que generar más ocasiones».

Luis Enrique incidió en este argumento para sentenciar que «el Málaga es un rival muy complicado», por lo que están «muy contentos por el resultado» obtenido en La Rosaleda.