­Francesc Arnau cierra su primer mercado de fichajes al frente de la dirección deportiva del Málaga CF con cinco fichajes (Chory Castro, Atsu, Cifu, Federico Ricca y Uche) y seis salidas (Chen, Flavio, Angeleri, Amrabat, Tighadouini y Espinho). El directivo catalán compareció ayer en la sala de prensa de La Rosaleda para hacer un barrido a todo lo que ha sido el mercado invernal y sobre los objetivos deportivos que toma ahora el equipo. Su primer trabajo a corto plazo: la renovación de Gracia.

«Cuando uno está por primera vez en un cargo tan importante como este es como hacer un máster, se aprende todo los días. Estoy muy contento de tener el grupo de trabajo que tengo. El ritmo es muy diferente al de La Academia. Todo se juega sobre la bocina. Estoy muy satisfecho de mi primera experiencia y ojalá todos estemos contentos con los resultados. Ojalá podamos disfrutar de lo que hay», dice su primera experiencia al frente de la secretaría técnica blanquiazul.

Arnau asegura que la plantilla ha quedado bien compensada tras el trabajo realizado en el mercado invernal y así se lo ha hecho saber Gracia, del que asegura que está contento con las posibilidades que tiene en su plantilla para el segundo tramo de competición. «Ahí está la habilidad del director deportivo, en convencer al entrenador. Al final siempre hemos llegado a un acuerdo. Está contento con las posibilidades que tiene en la plantilla. Lo demás ya tenéis que preguntárselo a él», comentó.

Sobre el capitulo de fichajes, Arnau explicó que algunos de los movimientos han tenido que llevarse a cabo para cubrir necesidades que ya existían, como el fichaje de un delantero y de jugadores de banda, y otros por las inesperadas marchas de Amrabat y Angeleri. El exportero malaguista hizo mención especial al trabajo en la llegada de Ricca, que posibilita variantes en la defensa -Torres estará más liberado para jugar de central cuando sea necesario- y además se convierte en un «valor de futuro» para la entidad. «El club tiene que reinvertir para que la rueda siga girando y podamos seguir creciendo y tener viabilidad. Ricca es un gran valor de futuro, está a las puertas de la selección y ha estado en todas las categorías inferiores. Ante la baja de Angeleri nos quedábamos con pocos efectivos en defensa. Al traerlo ahora adelantamos en su adaptación a Málaga. Con Ricca se ha reinvertido. Viene de un traspaso. Lo hemos fichado para trabajarlo y adaptarlo. Está en total crecimiento», aseguró.

También comentó las salidas de jugadores sin minutos en el equipo, separando casos diferentes como la rescisión de Flavio y la cesión de «Tigha»: «Flavio no ha tenido posibilidad de jugar, no tenía sentido que se quedara. El caso de Tigha es distinto, hemos buscado que tenga minutos para que siga manteniendo su valor».

Otro de los culebrones del tramo final de mercado que merecía explicación es la finalmente no salida de Tissone. Arnau dijo que en «ningún momento» llegó una oferta formal por él y por lo tanto sigue siendo uno más de la plantilla: «Es jugador del Málaga y no ha llegado ninguna oferta por él. Es uno más y tendrá que competir por un puesto como los demás».

Para terminar su extensa comparecencia, habló sobre La Academia y sobre jugadores que tienen que convertirse en aportes el primer equipo y « valores de club» en los próximo años. «El objetivo del filial es formar jugadores para el primer equipo. Juanpi, Ontiveros, Pablo... No solo aportan rendimiento al primer equipo, sino que también aportan patrimonio. La Academia es un pilar fundamental», finalizó.