El joven Fornals pecó de inexperiencia y, en el último minuto de partido, en un centro escorado desde la banda derecha, paró el balón con su brazo izquierdo dentro del área. El Sporting y el banquillo quería "comerse" al árbitro y al línier, pero el balón siguió rodando y llegó el final. Victoria por 1-0 para el Málaga. Tras varias actuaciones muy desgraciadas contra el Málaga, esta vez el Málaga se vio beneficiado.

El Málaga y todo el malaguismo se han quejado, con razón, de verdaderos arbitrajes calamitosos, como el vivido en Sevilla o en San Sebastián, o aquí en La Rosaleda contra Real Madrid y Barcelona. Sin ir más lejos, ante el Valencia, La Rosaleda acabó hastiada por un arbitraje malo de solemnidad. El de hoy contra el Sporting ha sido totalmente ecuánime, sin errores evidentes, hasta esa mano de Fornals. En la imagen, del programa "La Casa del Fútbol", se aprecia cómo hay mano.