La relación entre Jamal Iglesias y el jeque Al-Thani no vive su momento más dulce después de las querellas criminales que hay interpuestas en los juzgados entre ambos. El empresario de BlueBay asegura que ha hablado pocas veces con el catarí, pero que fue Al-Thani el que acudió a él. «Cuando hubo un problema, desapareció. Mandó a Shatat para que lo solucionase. El primer día que me reuní con el jeque no quería volver a Málaga y si desaparecía el club, le daba igual. Lo que quería es que no le reclamaran los 100 millones que debía. Había deuda con los jugadores. Al-Thani estuvo un año y medio sin aparecer hasta que se solucionaron los problemas. Había unos acuerdos para que las acciones se pasaran a Nas Spain y había dos socios. El 51 era del jeque y el 49, nuestro. Eso le daba derecho a ser presidente, puede opinar pero no tomar decisiones. Shatat era el apoderado del jeque», dijo Iglesias, que acudió a la presentación rodeado de veteranos blanquiazules como Muñoz Pérez, Burgueña, Astorga, Santi Llorente o Edu Aguilar.

Además, Iglesias se mostró sumamente crítico con los últimos movimientos del presidente del club. «Los acuerdos con Al-Thani prohibe que nadie pueda tener un sueldo del Málaga CF, pero se han saltado las normas. Estoy en contra de que salga un euro del Málaga hacia Al-Thani mientras que haya deuda, porque la deuda la ha generado el señor Al-Thani. Es un proyecto social, que si Al-Thani lo hubiese respetado como tal, habría hecho lo mejor».

«Sería ideal que el jeque reconociera los contratos firmados. Ahora el club sabemos cómo está. Se sabe cómo se toman las decisiones, quién las toma… ¿Es una situación lógica? ¿Se ha mejorado? ¿Tiene futuro? Ojalá tenga unos asesores buenos. No buscamos un retorno económico», afirman.

Hervás, por su parte, recordó cómo se gestó la unión. «No hemos querido ser el protagonista de la película. Hemos querido ser gestores del club, dando apoyo a un socio y con respeto, pero que adolece de esa parte gestora. Con buena voluntad se aportaron momento de inversión y de gestión. Hubo momentos en los que el señor Al-Thani se acercó al señor Iglesias porque no sabía gestionar», dijo.

«Los acuerdos con el jeque se firmaron notarialmente. Cuando tuvimos la desgraciada actitud del jeque de no reconocer esos papeles fuimos al juzgado y lo reclamamos allí. Y las cosas cuando se firman se tienen que cumplir».

Intento de compra. Iglesias desveló que le ofrecieron comprar el club a Al-Thani. «Le hemos trasladado una posibilidad de compra. Le hemos dicho que ponga precio y se la compramos. No queremos la presidencia del club, no buscamos notoriedad con el club. No es nuestro objetivo. Confiamos en este proyecto. Él sería el presidente pero nosotros la parte administrativa. Y la parte deportiva iría independiente. No puede estar pendiente del capricho del dueño, no somos expertos deportivos, para eso están los expertos».

Por último, no quisieron desvelar su inversión en el club. «En ninguno de los acuerdos había una obligación de aportación económica por parte de BlueBay. Cuando entramos había una deuda de 108 millones. Se hizo aportación económica adecuada para que los jugadores no se liberasen. Y se hizo una venta adecuada de jugadores. El jeque debía aportar 30 millones cuando el club estuviera saneado».